De cara a las elecciones presidenciales y en pleno rearmado del peronismo, el diputado nacional Felipe Solá anunció su alejamiento de la bancada del Frente Renovador junto a otros cuatro legisladores para armar el interbloque Red x Argentina con el Movimiento Evita.
“Para el Presidente la prioridad no es cuidar el trabajo ni el bolsillo de la gente. Por eso queremos juntar a la oposición, porque separados no alcanza ni en el Congreso ni en las urnas. No queremos límites para oponernos a un gobierno tan poderoso”, afirmó durante una conferencia de prensa en la Cámara baja.
“Goberné la provincia más grande de la Argentina durante la peor crisis de nuestra historia y ahí aprendí que para salir adelante la prioridad tiene que ser cuidar el trabajo y el bolsillo de la gente. Nuestra agenda legislativa responde a esa prioridad”, agregó el ex mandatario provincial que supo estar con el kirchnerismo y también formar una alianza con Francisco De Narváez y Mauricio Macri.
En este sentido, consideró que "aquel que trabaje para separar a la oposición está trabajando para cuatro años mas del gobierno". "Esos cuatro años serían letales para el país", advirtió
A su turno, el diputado del Movimiento Evita Leonardo Grosso destacó que lo primero que une a los legisladores de este nuevo espacio es "una férrea convicción de que tiene que haber una sola oposición". "Si hay dos espacios opositores estamos trabajando para Macri y no para el pueblo argentino", señaló.
De la conferencia participaron también los diputados nacionales Facundo Moyano, Fernando Ascencio, Daniel Arroyo y Jorge Taboada, otros tres que dejaron el Frente Renovador de Sergio Massa, y la legisladora Victoria Donda, alejada de Libres del Sur, los integrantes del Evita Grosso y Lucila Del Ponti, Araceli Ferreyra y Silvia Horne, del Peronismo para la Victoria.