Miles de personas coparon en las últimas horas las principales ciudades de Brasil para exigir la renuncia del presidente Michel Temer y la convocatoria a elecciones generales, en medio de la conmoción por la grabación donde el mandatario fue registrado cuando avalaba una coima para evitar que avance la investigación del Lava Jato.
Las protestas más importantes se registraron en Brasilia, Río de Janeiro, Recife, Belo Horizonte y San Pablo, según reportó la prensa local. Fueron convocadas por frentes de izquierda pero también participaron los grupos de derecha que el año pasado respaldaron la asunción de Temer tras la destitución de Dilma Rousseff.
En la capital, Brasilia, numerosos manifestantes se reunieron en la Plaza de los Tres Poderes, en la zona gubernamental, y frente al Palacio de Planalto, para exigir la dimisión de Temer. En tanto, hubo disturbios en el centro de Río de Janeiro, donde la Policía reprimió con gases lacrimógenos mientras los protestantes arrojaban piedras.
El Presidente adelantó que “no renunciará” a pesar de la grabación que difundió en las últimas horas la cadena O Globo, donde presta su acuerdo ante el megaempresario de la carne Joesley Batista para pagar una coima al ex presidente de la Cámara de Diputados local, Eduardo Cunha, y así evitar que aporte información de la operación Lava Jato.