La gobernadora María Eugenia Vidal arrancó la semana en el programa de televisión "El Diario de Mariana", un magazine de la tarde que emite El Trece destinado a -según la lógica del extinto periodista Bernardo Neustadt- la Doña Rosa del siglo XXI que se identifica en la sonrisa de Mariana Fabbiani, su conductora. Desde la comodidad que le representa ese lugar, la mandataria bonaerense se tomó su tiempo para defender al presidente Mauricio Macri y valorar la rectificación de sus "errores". Dijo que ella hace lo mismo y, además, aceptó responder preguntas sobre su vida personal -pareció encantada de entrar en ese terreno- para no olvidarse de que “fuera de mi trabajo, yo soy María Eugenia”.
La irrupción televisiva de Vidal se da luego de la peor semana política que atravesó el Gobierno nacional. El jefe de Estado tuvo que “volver a fojas cero” el acuerdo que iba a cerrar -como representante del Estado- con el Correo Argentino, una de las empresas de su padre Franco. Se trata, como se supo, de la condonación de una deuda millonaria que el holding de la familia presidencial mantiene con las arcas públicas. Acorralado, Macri dio marcha atrás. Brindó una conferencia de prensa para mostrar que es falible y usó una frase de diván para referirse a la compleja relación que mantiene con Franco: “Mi padre es un capítulo aparte”. También se vio obligado a dejar sin efecto la resolución de la ANSES que reducía el aumento de las jubilaciones. Fueron dos episodios que rápidamente empezaron a bajar el optimismo que irradiaba Macri, al menos hasta fin de año. Por eso, Vidal -“la dirigente con mejor imagen del país”, según la placa que eligió la producción del programa de Fabbiani- salió en su defensa.
“Estuve esta mañana con el Presidente; está tranquilo, está seguro”, diagnosticó Vidal cuando le preguntaron por los dos últimos episodios en los que Macri tuvo que volver sobre sus pasos. La mandataria bonaerense dijo que ella también es falible y adelantó, con el discurso de la honestidad a cuestas, que cuando deje inaugurado el 145 período legislativo en la Provincia, el próximo miércoles 1 de marzo, hablará frente a los diputados y los senadores de lo que “cree” que hizo mal en su primer año de gobierno.
“Sabemos cuál es el camino”, volvió a repetir. Además, reafirmando la tesis del cambio, agregó que la ruta por la que hay que transitar “es la Argentina que votó la gente en 2015”; siempre reconociendo –como Macri- que “va a ser un camino donde puede haber errores”.
LA PESADA HERENCIA, OTRA VEZ. El equipo de Gobierno aún no puede -o no quiere- soltar el recurso discursivo sobre lo que encontró cuando se hizo cargo de la gestión, en diciembre del 2015. A casi 15 meses, Vidal y los suyos todavía hablan de "la provincia quebrada”. Al menos sobre ese tema volvió este lunes.
“Todavía la provincia está quebrada. Eso significa que, estructuralmente, la provincia de Buenos Aires ha sido discriminada porque aporta el 36 por ciento y recibe el 17 por ciento”, detalló. Macri fundamentaba el error por el asunto del Correo argumentando que había que solucionarlo de alguna forma. “Queremos una solución a este problema que heredamos de 14 años sin solución. Hay que resolverlo, perjudica al Estado”, decía el Presidente la semana pasada.
LOS ASUNTOS PRIVADOS EN EL DIARIO DE MARIANA. En medio de la coyuntura marcada por los sofocones que viene atravesando la alianza gobernante y de la crisis económica que encuentra la expresión más dramática en la saga de cierres de fábricas y despidos masivos de trabajadores que se registra en la provincia que gobierna, Vidal se hizo tiempo para hablar de su vida íntima. Respondió a la consulta sobre si está en pareja o no. También, sobre si los hombres se le acercan. Fue más allá: describió los atributos que debe tener un hombre para poder conquistarla. También contó pasajes íntimos de la vida cotidiana con sus hijos. Por irrelevante, Letra P no reproduce el contenido de sus respuestas.
Fabbiani y los panelistas la despidieron agraciéndole el tiempo dispensado. Antes, la conductora le dijo, sosteniéndolo como verdad irrefutable: “Todo el mundo tiene una imagen muy positiva del Gobierno”.
