Cambiemos fustigó al delasotismo por permitir que la FAM “continúe como una filial” K
Los cordobeses que integran el frente encabezado por Macri dispararon con munición gruesa. Hablaron de “revancha desestabilizadora”. Y sentenciaron: "Unión por Córdoba quiere volver al pasado".
Lejos de aquellos guiños pre-ballotage de José Manuel de la Sota que se materializaron en un aplastante triunfo de Mauricio Macri en Córdoba, la relación entre Cambiemos y el oficialismo de esa provincia llegó a su pico de máxima tensión tras la designación de la matancera Verónica Magario al frente de la Federación Argentina de Municipios (FAM) con el respaldo de intendentes delasotistas. Así, los cordobeses que reportan al frente de gobierno en el orden nacional fustigaron: “Fueron los votos del 'cordobesismo' los que permitieron que esta institución continúe como una filial kirchnerista de los barones del conurbano bonaerense”. Y hablaron de “revancha desestabilizadora”.
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Este escenario encendió la furia en la mesa provincial de Cambiemos Córdoba, teniendo en cuenta que el candidato de ese espacio para conducir los destinos de la FAM era el intendente de la capital cordobesa, el radical Ramón Mestre.
“Tuvieron la oportunidad histórica de federalizar institucionalmente a los miles de municipios de toda la Argentina. Pero no lo hicieron, decidieron y demostraron a través del voto que Unión por Córdoba quiere volver al pasado. Ese del que la gran mayoría de los argentinos decidió dejar atrás”, se disparó en un comunicado fue firmado por los radicales Ramón Mestre, Mario Negri y Orlando Arduh; los macristas Nicolás Massot, Javier Pretto, Darío Capitani y Gabriel Frizza; y los juecistas Ernesto Martínez y Daniel Juez
“Sentimos que el peronismo tiene la responsabilidad cívica de entender que perder una elección como la del año pasado no debe ser utilizada como una excusa para una revancha desestabilizadora. Sino, una oportunidad para emprender su demorada democratización interna”, siguieron con la encendido escrito para añadir: “La agonía del modelo Nacional y Popular, cuyos espasmos autocráticos sobrellevamos en los primeros meses del gobierno de Cambiemos, anuncia que no todos han comprendido cabalmente este concepto. Está claro que Unión por Córdoba y sus intendentes no asumen ni toleran, que han perdido una elección a nivel nacional”.
“El peronismo de Córdoba, tal como lo hiciera en 2011 entregando su lista de Diputados, hoy priorizó sus intereses partidarios y, a espaldas de la gente, votó a la ultrakirchnerista Magario”, puntualizaron.