En un acto sobrio y con pocas sorpresas, Daniel Scioli, finalizó el jueves a la noche su campaña de cara a las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias del próximo 9 de agosto. Al Pabellón del Bicentenario de Tecnópolis concurrió gran parte del actual gabinete de ministros, así como también gobernadores, intendentes, sindicalistas y empresarios. Pidió el voto de los indecisos y dijo que continuaría las políticas de los últimos doce años, pero a su manera.
Los militantes fueron los primeros en llenar la sala. Dos horas antes de que empezara formalmente el acto, ya estaban desplegadas las banderas de Kolina, La Cámpora, el Movimiento Evita y otras organizaciones políticas y sociales. Para amenizar la espera hubo cumbia y material audiovisual en la gran pantalla ubicada en el fondo del escenario. El color naranja tuvo gran presencia. Incluso las banderas de algunos dirigentes contaban con dos versiones: una con el tradicional celeste y blanco, y otra con el color característico de la gestión de Scioli en la provincia de Buenos Aires.
Los asistentes llegaron bastante temprano al evento, que estaba convocado para las 18, pero que empezó casi una hora más tarde. Una de las primeras figuras políticas de importancia en llegar al predio de Tecnópolis en Villa Martelli fue Antonio Caló, titular de la CGT oficial. “Va a ser un día peronista. Salió el sol. Vamos a festejar”, adelantó. “Nosotros como trabajadores estamos alineados con este proyecto porque creemos y tenemos mucha esperanza en Scioli”, dijo el dirigente gremial.
Algunos ministros también se mostraron dispuestos a hablar con la prensa. Alberto Sileoni, titular de la cartera de educación, se refirió al escenario que va a enfrentar el próximo ministro: “está en mejores condiciones que cuando asumimos. Hoy existe un sistema educativo que puede llamarse así”. Respecto de la interna bonaerense y una posibilidad de ruptura debido a las acusaciones cruzadas, Sileoni fue taxativo: “No hay riesgo de ruptura. Aníbal dijo que si quisiera dar nombres, los dice. El lunes estamos todos juntos ante un objetivo supremo”.
“Hay una propuesta muy sólida y consolidada, que es la del Frente para la Victoria. La diferencia entre Scioli y el resto de los candidatos es altísima. Demuestra que para nada le queda grande la presidencia de la Nación”, declaró el ministro de Defensa Agustín Rossi antes de ingresar al predio del acto. Respecto de su presencia en el cierre de campaña de Aníbal Fernández –y no en el de Julián Domínguez–, sostuvo: “Sentí que era una obligación moral y política estar ahí después de la operación política y mediática. Está claro que ese ataque fue un ataque al jefe de Gabinete de la presidencia, a nuestro proyecto político, y había que mostrar la contundencia del rechazo”. Además, declaró que no descarta que “otra operación de esas características pueda aparecer antes de octubre”.
El jefe de Gabinete Aníbal Fernández se hizo presente con Martín Sabbatella, su compañero de fórmula, y declaró que “Scioli es el mejor candidato, lejos, para sostener las políticas que llevaron adelante Néstor y Cristina”. Además, calificó la gestión de los últimos doce años como “Peronismo del siglo XXI”. También estuvieron Julián Domínguez y Fernando Espinoza.
Uno de los últimos en entrar al Pabellón del Bicentenario fue Carlos Zannini, quien durante el acto no se dirigió a la militancia reunida en Tecnópolis. “Tiene que haber optimismo porque nos está yendo bien en todos lados. Hemos trabajado mucho. Hay que ver el resultado el domingo y tratar de que sea lo mejor posible”, declaró el candidato a vicepresidente de la Nación ante los periodistas antes de ingresar.
En dos paneles a los lados del atril principal se ubicaron las principales figuras políticas de la noche. Además de su compañero de fórmula Carlos Zannini y su esposa Karina Rabolini, estuvieron el titular de la CGT oficial, Antonio Caló; el Secretario General de la Presidencia, Eduardo “Wado” de Pedro; el gobernador de Jujuy y presidente del Partido Justicialista, Eduardo Fellner; el gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri; de Misiones, Maurice Closs; de Mendoza, Francisco “Paco” Pérez; de Santiago del Estero, Claudia Ledesma Abdala; de La Rioja, Luis Beder Herrera; de Salta, Juan Manuel Urtubey; y también la gobernadora recientemente electa por Tierra del Fuego, Rosana Bertone. También estuvo presente El gobernador de Río Negro Alberto Weretilneck, quien hasta esa noche no se había expresado a favor de ninguno de los candidatos presidenciales.
Abajo del escenario estuvieron Alicia Kirchner, Julio De Vido, Gabriel Mariotto, Axel Kicillof, Andrés "el cuervo" Larroque, Mariano Recalde, Agustín Rossi, Alberto Pérez, y Alejandro Granados, entre otros.
Minutos antes de las 19, el locutor del acto anunció el discurso de Daniel Scioli, único orador de la noche.
“Acá estoy para expresar mi visión de futuro”, fueron las primeras palabras del actual gobernador de la provincia de Buenos Aires, en un discurso que estuvo principalmente centrado en lo que será su plataforma de gobierno en caso de acceder a la presidencia. “Quisimos encontrarnos acá en Tecnópolis porque es un emblema de la innovación, la ciencia y la tecnología. Porque expresa políticas de vanguardia que nos hacen sentir orgullosos a todos los argentinos”, inauguró, e inmediatamente inició un repaso de las políticas de gobierno de Néstor y Cristina Kirchner, entre las que destacó el pago de la deuda externa, el rechazo al ALCA, la Asignación Universal por Hijo, la recuperación de YPF y la administración pública de las jubilaciones, y la política de derechos humanos, entre otras.
“Voy a hacer lo que haga falta, sostener lo que haya que sostener, profundizar lo que haya que profundizar, cambiar lo que haya que cambiar y ¿saben qué? Lo voy a hacer a mi manera”, expresó a modo de confirmación del sentido de las políticas, pero desmarcándose del actual estilo de gestión. Como parte de su programa de gobierno, anunció medidas como la reducción del empleo en negro, la implementación de la doble escolaridad en todas las escuelas públicas, un aumento en el presupuesto de ciencia y tecnología para llegar al uno por ciento del Producto Bruto Interno, la toma de crédito internacional “para inversión pública y privada” y la expansión a nivel nacional de las Unidades Primarias de Atención (UPA), para nombrar las más importantes.
En uno de los momentos más encendidos de su discurso, que duró poco más de media hora, Scioli apeló al voto de los indecisos e independientes. “Los convoco a votar a favor de la agenda del gran desarrollo nacional”. También dedicó un párrafo aparte a los jóvenes: “Voten a favor de las oportunidades. Los convoco a protagonizar el trasvasamiento generacional al que nos convocó Perón”.
“Yo les pido que me den la oportunidad de seguir construyendo una gran argentina. ¿Quieren una vida mejor? El domingo vayan a buscarla. Yo les aseguro que la van a tener. Esa será la victoria de todos”, concluyó confiado. Descontada su presencia en las elecciones generales de octubre, el resultado del próximo domingo 9 de agosto será más un termómetro que una prueba para el candidato del Frente para la Victoria.