Luego de la derrota y tercer lugar de Mariano Recalde en las elecciones para la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, el sciolismo trabaja para retener los 400522 votos que consiguió el Frente para la Victoria el domingo 5 de julio.
Primero, el propio gobernador de la provincia de Buenos Aires se trasladó hasta el barrio de San Telmo para protagonizar un acto de campaña. El candidato presidencial del kirchnerismo volvió a sus pagos luego de las caminatas que realizó con el titular de Aerolíneas Argentinas en Villa Lugano y el evento que compartió en el barrio de Pompeya, donde se lo vio con su compañero de fórmula, Carlos Zannini.
El martes 7 de julio, ola naranja de por medio, Scioli desembarcó en territorio porteño inaugurando el Ateneo para la Victoria junto con su jefe de Gabinete, Alberto Pérez; el titular del Banco Provincia, Gustavo Marangoni; el líder de los taxistas, Omar Viviani; el titular del UOM, Antonio Caló; y el presidente del PJ porteño, Víctor Santa María.
Además de alterar al PRO por su llegada a la Ciudad, el ex motonauta adelantó que trabajará para “fortalecer las autonomías municipales para acercar el estado a la gente”. Se trata de un tema fetiche del espacio que gobierna la Ciudad y que Horacio Rodríguez Larreta prometió que “avanzará con Mauricio”, en referencia a que con el jefe de Gabinete en Bolívar 1 y el líder del espacio en Balcarce 50 se mejorará la relación Nación – Capital Federal.
“Mientras nosotros nos peleamos con Lousteau, Scioli viene a nuestro lugar, a la Ciudad de Buenos Aires, y hace un acto enorme con su ola naranja. Parece joda”, contó indignado un ministro cercano a Macri con despacho en Parque Patricios.
Ahora, Scioli mandó a Karina Rabolini a hacer campaña en la Ciudad de Buenos Aires con el objetivo de retener el 21,91 por ciento de los votos porteños que acumuló la fórmula Mariano Recalde – Leandro Santoro.
La presidenta de la Fundación Banco Provincia visitó la Villa 1.11.14, ubicada en el barrio de Flores, donde, en el marco del programa “Una Mirada para los Niños” entregó anteojos a niños que asisten a la parroquia Santa María Madre del Pueblo.
Acompañada por la gerente de la Fundación, Soledad Peralta, Rabolini manifestó que “fue un inmenso placer conocer y poder ver el trabajo que realizan los sacerdotes Gustavo Carraza y Hernán Morelli acá en la villa”.
“Como dice el Papa Francisco, la solidaridad de los pueblos se mide según cómo se trata a los que menos tienen, y es por eso que quienes estamos en una situación más privilegiada tenemos la obligación moral de ayudar a aquellos que más lo necesitan”, concluyó la esposa del candidato a presidente del FpV.