Sergio Massa llegó al Senado bonaerense, acompañado por una caja de cartón repleta de invitaciones. “Encuentro provincial del Frente Renovador sábado 38 de marzo, 17.30 horas, Sociedad Alemana de Gimnasia de Villa Ballester”, indicaban las tarjetas numeradas.
El gesto marcó de forma elocuente el motivo principal de su visita. Contener a la tropa y dejar en claro el lugar y el momento indicado para descargar las diferencias internas.
En la reunión estuvieron todos los senadores y diputados del espacio, salvo el caso de Baldomero Álvarez de Olivera, que no mostró interés por el encuentro. Aunque no quiso hacer declaraciones, quedó claro que el ex intendente de Avellaneda está evaluando algún nuevo destino.
En cambio, los pre candidatos a la gobernación, que en los últimos días estuvieron fogoneando la interna acusando fundamentalmente al también candidato Francisco De Narváez, dieron el presente. Fue el caso de Roque Cariglino, que funciona en tándem con su hermano, Jesús, el intendente de Malvinas Argentinas.
“¿Adónde? Nosotros no nos vamos a ningún lado, estamos acá”, afirmó el senador ante la consulta de Letra P. Se refería al rumor que lo mostraba en alianza con el PRO. Sin embargo, no descartó un encuentro en el territorio con Julián Domínguez, precandidato a la gobernación por el FpV.
“El presidente de la Cámara de Diputados quiere juntarse con Jesús y él por supuesto no le va a decir que no”, sostuvo. “Esta chichoneando un poco”, mencionó con picardía un referente del massismo que participó del encuentro.
También fueron de la partida los legisladores que responden al diputado nacional Darío Giustozzi. El caudillo de Almirante Brown, y postulante en la provincia, había mostrado en reiteradas oportunidades su malestar con el ingreso de Francisco De Narváez. Además, estuvieron los senadores Gabriel Pampin y Patricio Hogan, cercanos a Felipe Solá. Y hasta la diputada Mónica López, que llegó tarde, estuvo callada toda la reunión y se fue presurosa sin hacer declaraciones.
“Para que quede claro, lo que vamos a definir el sábado es nuestra organización provincial, nuestra mesa de conducción política y nuestra forma de dirimir las candidaturas, no solo a gobernador, sino también a legisladores e intendentes, y si, vamos a plantear la necesidad de acotar las fórmulas”, afirmó Massa una vez culminado el encuentro. Sin abandonar su sonrisa, el candidato presidencial aseguró que “el clima de reunión fue bárbaro”. Y pidió consultar a “Mónica (López)” o a “Mario (Giacobbe)” si deseaban saber de la opinión de los precandidatos a la gobernación.
“Lo que hay es mucho ruido de operación y la verdad que lo más importante es que decidimos impugnar la candidatura de Roberto Carlés, avanzar en el pedido de emergencia de seguridad en la provincia, insistir en con la policía judicial”, remarcó el candidato. Y como si estuviera hablándoles a sus dirigentes, manifestó: “lo demás es secundario, lo más importante es que entendamos que la gente lo que espera de nosotros es respuestas a los problemas del día”.
“Todos tienen posibilidad de plantear dudas e inquietudes, somos un espacio plural y democrático y eso nos distingue de las otras fuerzas que se parecen más a empresas o a sucursales del Estado”, concluyó con palo directo a Mauricio Macri y Daniel Scioli, sus futuros oponentes.