"En Bahía el cambio es Feliú", dice uno de los últimos slogans de campaña del candidato a intendente de Bahía Blanca por el Frente para la Victoria. Mientras, desde aquella ciudad de la Sexta sección electoral bonaerense definen al diputado como "rehén" de una interna peronista que en las últimas semanas provocó la adhesión de Dámaso Larraburu, tras pegarle el portazo al aspirante a la presidencia por la alianza UNA, Sergio Massa.
Hace poco, el ex candidato local del Frente Renovador tuiteó algo que hasta hace pocas semanas era insólito: "A esta altura del partido, debates, presentaciones de equipo, experiencia, cultura general, etc, el nuevo Intendente será @Feliu_2015".
De esa manera, el histórico armador del peronismo en aquella zona del territorio provincial y muy conocido por todos en Bahía Blanca volvió a blanquear su apoyo al kirchnerismo -al que en teoría intentaba combatir para estas elecciones-. Todo, sumado a los retuits que día a día da a las actividades de campaña sciolista.
“No tengo dudas, es el que mejor podrá representar los intereses de Bahía”, le dijo Dámaso a BahíaPolítica, en referencia a Marcelo Feliú, además de atacar al candidato que mejor mide en las encuestas y que ganó las últimas PASO, Héctor Gay, de Cambiemos.
"En Bahía explotó el massismo, explotó el municipio", analizaban en aquella ciudad el día después de la declinación de la candidatura de Larraburu y su portazo al Frente Renovador. A partir de ahí el peronismo bahiense se reagrupó y reordenó de cara al 25, primero con la alianza confirmada entre los dos dirigentes que compitieron en la interna del Frente para la Victoria -Feliú y Budassi- y luego con la entrada por la ventana de Dámaso.
De esta manera, el randazzista Feliú -quien hasta el último minuto previo al cierre de listas dudaba sobre su postulación por todo lo que había pasado con Florencio Randazzo-, se ve rodeado de los dirigentes que quiso mantener en la vereda de enfrente antes de agosto. Ahora no le quedó otra que hacer campaña con ellos. Todo, mientras se presenta como "el cambio", algo que desde el resto de los partidos critican.