“No hay ninguna perspectiva de que, de esa convocatoria, pueda surgir nada positivo para el movimiento obrero”. Duro y con firmeza, Hugo Yasky, un aliado del kirchnerismo desde la CTA, no dudó un segundo en criticar a Moyano y Barrionuevo, hoy nuevamente aliados desde la CGT.
Como le dijo a la agencia estatal Télam, Yasky sostuvo que trabajan para “generar la ilusión óptica de que ahí hay dirigentes sindicales preocupados verdaderamente por la situación de los trabajadores que representan”.
“La unidad de la que hablan es la expresión desdibujada de un encuentro en el que solamente hubo representantes de un sector minoritario de la clase trabajadora”, remarcó.
En la misma sintonía, el diputado nacional, Edgardo Depetri, sostuvo que la cumbre “terminó vaciada y en un encuentro que ha expresado más de lo mismo, con un relato sindical que lo que intenta es legitimar que los trabajadores argentinos enfrenten al gobierno de Cristina Fernández de Kirchner”.
“La cumbre de Barrionuevo y Moyano no va a aportar mucho en el debate, están viendo cómo recuperan protagonismo y decisión en el partido justicialista”, advirtió. “No hay ninguna duda que el gobierno de Néstor y Cristina han cambiado el paradigma: el modelo económico del pasado siempre fue ajuste y Argentina se ha industrializado y ha incorporado 5 millones de puestos de trabajo en estos años”.