En la habitual rueda de prensa que mantiene en la Casa Rosada, el jefe de Gabinete marcó su postura frente a las acciones y a los dichos de los gremialistas, al reconocer que “nos alegra que haya seis millones de nuevos puestos de trabajo”.
“Me parece bien que puedan disfrutar mejores vacaciones que sus trabajadores”, expresó.
De esa manera, Capitanich hizo referencia a la cumbre que mantendrán los líderes sindicales en la costa bonerense y que estará encabezada por Hugo Moyano y Luis Barrionuevo, opositores al gobiernos.
El jefe de Gabinete, con esas declaraciones, también intenta desautorizar una reunión que cuenta con la posible participación de dos candidatos firmes a la presidencia de cara a 2015, Daniel Scioli y Sergio Massa.
Otro de los apuntados en las declaraciones de Capitanich fue el sector agropecuario. Luego de que las entidades del campo amenazaran con la posibilidad de un paro debido a las quejas que lanzaron por la medida del gobierno de liberar la exportación del trigo a niveles que no les parece les parece conveniente.
Contra el campo
“Tenemos que dividir las cuestiones desde el punto de vista político y el gremial”, indicó Capitanich, a la vez que aseguró que “no hay actividad que crezca sin ganancias”.
El exgobernador chaqueño sostuvo que “en los noventa, había 20 millones de hectáreas sembradas. En los últimos años, esa superficie creció a 32 millones”.
“Uno puede tomar varios parámetros para medir el sector agropecuario y determinar su impacto”, reconoció. “No creo que el valor por hectárea crezca si no hay rentabilidad”.
La caída de las reservas
Por otro lado, Capitanich declaró que “bajan las reservas porque se paga deuda que contrajeron otros”.
“Argentina no contrajo más deuda a tasas usurarias. Algunos quieren que el país se endeude a altas tasas para tener control de la economía”, indicó.
En ese marco, resumió que con la reservas “se pagó deuda, es evitó endeudamiento a tasas usurarias y se priorizó el empleo y las exportaciones”.