La pelea entre el fundador de Mercado Pago, Marcos Galperin y los bancos tiene incontables capítulos y los chipazos recientes por el código QR para pagos con tarjetas, reavivaron el fuego cruzado. Desde el inicio de su gobierno, Javier Milei le abrió el juego a las billeteras virtuales y en medio del nuevo conflicto, dejó que la tensión escale.
El 1° de mayo venció el período de gracia que le había dado el ex presidente del Banco Central Miguel Pesce al dueño de Mercado Libre y el código QR comenzó a ser interoperable para pagos con tarjetas, al igual que ya existe para las transferencias. Así, la empresa de Galperin debe abrir su sistema al resto de las billeteras virtuales.
El pedido de los bancos, a través de Modo, es repartir la comisión que propone la billetera virtual más usada en la red de operaciones, en la que invirtió hace varios años la la compañía argentina radicada en Estados Unidos. El uso del QR para pagar con dinero en cuenta ya tiene "peaje".
La guerra por el negocio, no por la comisión
Si un usuario va a un comercio pequeño, el local paga un porcentaje que va del 0,8% al 1,35% y la repartija supone que el 75% va a la firma que puso el código y el restante a la app con la que se escaneó. En comercios más grandes, la repartición es al revés. Fuentes de la empresa de Galperin estimaron que el cobro para el caso de las tarjetas significaría alrededor de u$s30.000 promedio por mes para las entidades financieras.
Mercado Pago hizo tres propuestas a los bancos. La última, preveía que el 0,03% de la comisión que se le cobra a los comercios lo pagara la entidad emisora de la tarjeta de crédito. Hasta ahora, obtuvo sólo rechazos.
A diferencia de la anterior gestión, el titular del Central, Santiago Bausili se desentendió de regular los porcentajes de la comisión, como ocurrió años atrás con los pagos QR vía transferencia. Así, dejó que la tensión escalara.
Según pudo saber Letra P, la autoridad monetaria estaba dispuesta a aplicar sanciones apenas se terminó el plazo determinado. Por pedido de la entidad, Mercado Pago accedió a entregar sus credenciales de seguridad a Modo, que dice tener operativas sus terminales para poner en marcha la interoperabilidad. Fuentes entendidas en el tema advirtieron que le falta un paso clave: la tokenización de las tarjetas. Es decir, los protocolos de seguridad.
Por qué denunció Modo a Mercado Libre
La Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC) deberá ahora trasladar a las partes la denuncia que hizo Modo, no solo por la interoperabilidad del QR, sino también a raíz de una serie de acusaciones. La más grave, la de la integración vertical.
Según Modo, "los usuarios del marketplace de Mercado Libre se ven insalvablemente obligados a utilizar única y exclusivamente los servicios de Mercado Pago, tanto la billetera como la cuenta, para pagar o cobrar –con las altas comisiones asociadas a ello–, o utilizar los servicios de procesamiento de cobros de la propia empresa o alguna de sus subsidiarias integradas verticalmente, en efecto 'atando' la transacción de Mercado Libre a una transacción de Mercado Pago”.
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Billeteras virtuales en la era Javier Milei
La firma de Galperin rechazó de forma contundente el comunicado al afirmar que se trata de algo "tan absurdo como pretender que un supermercado ofrezca productos de marca propia de un supermercado competidor o que los bancos ofrezcan en sus sucursales y home banking los productos y servicios de Mercado Pago". También planteó que "las transferencias a través de la app Modo desde cuentas bancarias (CBU) hacia cuentas virtuales (CVU), de competidores fintech, han sido limitadas o directamente imposibilitadas por los bancos y por Modo”.
Entre el menú de soluciones, la CNDC podría obligar a Mercado Libre a “abrir” su QR, al tiempo que se negocia un acuerdo comercial entre las partes, algo que el BCRA ya intentó hacer, aunque sin éxito.
Billeteras virtuales, juego abierto
Desde el minuto uno de su gestión, el gobierno de Milei le abrió el juego bancario a las billeteras virtuales. Con el DNU 70/2023 les dio la posibilidad de que los empleadores acrediten el salario de sus trabajadores no sólo en las cuentas de entidades bancarias, sino también "en otras categorías de entidades que la autoridad de aplicación del sistema de pagos considere aptas, seguras, interoperables y competitivas", como las billeteras virtuales.
El primero en celebrarlo fue Galperin, pero Pierpaolo Barbieri, dueño de Ualá, le ganó de mano y abrió esa posibilidad a su clientela.
Un punto que llama la atención en especial durante este conflicto es que el decreto definió también que cualquier entidad puede emitir tarjetas de crédito o hacer efectivo el pago. Es decir que deja entrar más jugadores al mercado de tarjetas. Además, la normativa con la que Milei comenzó su gestión elimina la distinción entre tarjetas físicas y virtuales, algo que en los hechos no cambia mucho dados los avances de la industria pero sirve para dar paso a otro cambio significativo: elimina prohibiciones a cláusulas contractuales.