La compañera de fórmula de Javier Milei, Victoria Villarruel, decidió este martes no viajar a Rosario junto al economista y hacer campaña en la Ciudad de Buenos Aires, con sello propio y en compañía del referente local del espacio, Ramiro Marra.
La diputada convocó a la gente a las 17 en la esquina de Santa Fe y Callao, donde cortó el tránsito en plena hora pico y caminó durante dos cuadras en dirección a avenida Libertador. Unas 500 personas se acercaron a tomarse selfies y obligaron a la candidata a vicepresidenta a hacer esfuerzos para mantener el equilibrio.
"Publicó un tuit al mediodía y trajo toda esta gente. Es impresionante", celebró Marra, quien llegó primero para tomarse fotos con la militancia. El flyer del mini evento tenia un logo con la V de Victoria, lo que abrió especulaciones sobre el inicio de un recorrido propio. "Nada que ver. Siempre tuvo su sello. Marra también lo tiene", aclararon desde LLA.
Villarruel bajó de auto junto a un custodio, encargado de improvisar un cordón para que pudiera llegar al punto de encuentro. También la acompaño el diputado electo de LLA, Guillermo Montenegro, encargado de cuidarle las espaldas. Luego se sumaron la legisladora porteña, Lucía Montenegro, y la diputada electa Marcela Pagano.
Ni bien piso una baldosa, Villarruel fue al encuentro de un joven que la esperaba con un parlante para emitir el himno nacional e invitó al público a cantarlo completo, con el final a modo arenga, con clásico grito en "Oh juremos, con gloria morir".
Después, la diputada empezó a caminar entre la gente para tomarse fotos y saludar. La militancia era heterogénea: había adultos mayores -un segmento que empatiza con la abogada- y jóvenes que mataban la espera con charlas políticas.
Desde los autos se mezclaron saludos con algunos insultos. Entre los transeúntes hubo algún abucheo al pasar, pero lejos estuvieron de derivar en algún enfrentamiento. La gente reaccionaba con algunos hits libertarios, como "La casta tiene miedo". Tampoco hubo provocaciones entre los curiosos que salieron a los balcones a curiosear.
Villarruel caminó dos cuadras y ni siquiera perdió la sonrisa cuando tropezó al bajar de la vereda. Recién aceptó irse cuando se tomó la última foto y brindó el último beso, mientras un grupo interrumpía al grito de "Viva la Libertad Carajo".
La aparición de Villarruel sin Milei no es casual y no se debe a ninguna crisis del binomio, sino a que la vice se convirtió en la única vocera autorizada en La Libertad Avanza, luego de los fallidas analogías de la diputada electa, Diana Mondino. Entre los varones, sólo tiene el micrófono abierto Guillermo Francos, nombrado futuro ministro del interior de un gobierno de LLA.
Mientras hacía equilibrio entre la gente, Villarruel buscó las cámaras para defender a Milei de su pobre performance en el debate contra el rival del próximo domingo, el oficialista Sergio Massa. "Ni yo ni Javier somos responsables de lo que está pasando y no tenemos que rendir cuentas. Tiene que hacerlo Massa, por su gestión como ministro de Economía y presidente de la Cámara de Diputados", sostuvo la candidata a vice.
Villarruel confirmó que el PRO apoyará en la fiscalización, para prevenir prácticas que "son bastante dudosas". Negó que el partido de Mauricio Macri no haya tenido invitados al debate. "Ellos no quisieron venir porque era nuestro momento. Y está bien, somos la segunda fuerza".
Imperturbable, la diputada respondió preguntas sobre su reclamo de Justicia para víctimas de violencia política, una lucha que a veces la acerca al negacionismo de la última dictadura.
Marra también habló antes de irse. “Es increíble la actitud que toma el gobierno, quieren tapar el sol con la mano, pero las variables macroeconómicas se los llevaron puestos y los que sufrimos somos los argentinos”, apuntó el legislador.