Maximiliano Pullaro junto a Gisela Scaglia en las escalinatas de la Casa de Gobierno.
Maximiliano Pullaro, el nuevo gobernador de Santa Fe, guardó para el final del largo domingo el mensaje y guiño político para la coalición que lidera, Unidos para Cambiar Santa Fe. El radical remarcó la importancia de la unidad entre los diferentes partidos y pidió que en el horizonte siempre sea un objetivo sostener el diálogo interno. Mención especial para Felipe Michlig, titular de la UCR provincial, Cristina Cunha y Enrique Estévez, presidentes del PRO y el socialismo.
En las escalinatas de la Casa Gris y a pocos minutos de la medianoche, el gobernador mostró una cara distinta a la que entregó horas previas en la Legislatura. Se lo vio más distendido, emotivo y descontracturado. En su segundo discurso del día apuntó a la “unidad” y a quienes van a trabajar en su gestión. “Demostramos que podíamos hacerlo juntos y demostramos diálogo. Entendíamos que podíamos gobernar Santa Fe, y no es la hazaña de una persona, lo hicimos juntos”, dijo Pullaro.
En el comienzo de su alocución recordó al ex gobernador Miguel Lifschitz y contó que decidió llamar a varios funcionarios y funcionarias que estuvieron en su gestión para que lo acompañasen en la asunción. Mencionó que tras la “angustia” de perder las elecciones de 2019, comenzaron a trabajar pensando en recuperar la provincia y que ese objetivo fue posible -reiteró- gracias a la “unidad”. “Logremos que en cuatro años no nos pase lo que nos pasó”, pidió.
Se refirió a su persona como “alguien de trabajo y que le mete” y anunció que a las 6.30 ya estará en Casa Gris. Dio pinceladas de lo que quiere y espera de su equipo: “Le pido a los funcionarios que nunca perdamos la humildad y no olvidemos que somos servidores. Seamos austeros por que la sociedad la está pasando mal. Por supuesto que vamos a ser honestos, con no robar alcanza”.
Antes de Pullaro, la vicegobernadora Gisela Scaglia prometió trabajar por lo sectores productivos de la Bota y codo a codo con las comunas y las intendencias. Minutos antes habían jurado los ministros, ministras y quienes ocuparán las secretarías. Gustavo Puccini, ministro de Producción, y Victoria Tejeda, ministra de Desarrollo Social juraron “por la memoria de Raúl Alfonsín”, del mismo modo que el propio Pullaro lo había hecho un rato antes.
En un clima agradable y amistoso Maximiliano Pullaro recibió en el Salón Blanco el bastón y la banda por parte del gobernador saliente, Omar Perotti. Mientras la recientemente asumida concejala de Unidos de la ciudad de Santa Fe, Silvina Cian, oficiaba de maestra de ceremonia, el radical se abrazó con funcionarios y funcionarias y hasta se tomó el tiempo de mostrarle el bastón a su padre.
Una de las particularidades que tuvo la noche fue que se realizó una oración interreligiosa en la que participaron un pastor evangélico, un cura y un rabino. A su vez, el radical recibió una carta del Padre Ignacio deseándole éxitos y diciendo que va a rezar por él.