La vicepresidenta, Victoria Villarruel, podría anotarse un triunfo en el Senado este miércoles, cuando en una sesión convocada para las 15 horas buscará votar autoridades de la Cámara y repartir cupos en las comisiones sin la ayuda de Unión por la Patria (UP), el bloque más grande, con 33 miembros. Como anticipó Letra P, el senador de La Libertad Avanza Bartolomé Abdala será elegido presidente provisional y quedará relegado el formoseño Francisco Paoltroni.
En una reunión con autoridades de bloque, este martes Villarruel exhibió capacidad de construir una mayoría de 39 votos, compuesta por los siete de LLA, 24 de los bloques de Juntos por el Cambio (JxC - 13 de la UCR, 7 del PRO, 4 de Cambio Federal), tres votos de Unidad Federal y cinco de partidos provinciales: dos de Santa Cruz y de Misiones; y otro de la rionegrina Mónica Silva.
Sólo esta última no fue convocada a la reunión, pero actuaría en sintonía con la dupla misionera, que fue representada por Sonia Rojas Decut, quien responde al líder de su provincia, Carlos Rovira, quien una vez más se convierte en socio clave del oficialismo en el Congreso. También estuvo muy activo para alcanzar un acuerdo el correntino Carlos Espínola, quien comparte UF con Edgardo Kueider -ambos del peronismo- y la cordobesa Alejandra Vigo, esposa del gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti.
Fuentes de UP confirmaron a Letra P que el jefe de la bancada, José Mayans, abandonó la reunión sin llegar a un consenso. Anunció que si convocan a una sesión la impugnará porque entiende que, antes, el presidente Javier Milei debe convocar a extraordinarias. En LLA consideran que no sería necesario, al estar en el temario la elección de autoridades y el reparto de comisiones.
Además de Abdala, en la sesión se elegirán otras tres vicepresidencias. Si no renuncia, hasta febrero ocupará la principal la radical Carolina Losada, que le correspondería a UP. Vigo y una figura del PRO ocuparían esos lugares si el peronismo no vuelve a la mesa. Villarruel logrará que se vote como secretario legislativo a Agustín Giustinian (empleado del PRO) y como secretaria administrativa a María Laura Izzo. El resto de la oposición podrá repartirse tres prosecretarías: parlamentaria, administrativa y de coordinación operativa. La primera de ellas aún la tiene el radical Juan Tunessi, quien coordinará la sesión de este miércoles.
El acuerdo
Villarruel negoció en las últimas dos semanas con todas las bancadas y estuvo cerca de cerrar con UP, cuando le ofreció a Mayans la vicepresidencia y la prosecretaría parlamentaria. "Tengo 33 votos, no tengo que ceder nada", fue la frase que repitió el formoseño, quien tampoco quiso adelantar la sesión para elegir autoridades.
En las gestiones participó el diputado de LLA, Guillermo Montenegro, socio político de la vicepresidenta. El jueves pasado, el jefe de UP reclamó que como parte de la negociación se desista de Paoltroni como candidato de LLA para la presidencia provisional, pese a que había sido anunciado oficialmente por el presidente. El último sábado, el formoseño no tuvo mejor idea que cuestionar a Villarruel en una entrevista por haber escuchado la oferta de su coterráneo y este lunes el binomio que ganó las elecciones presidenciales acordó reemplazarlo.
El mismo jueves, Villarruel se reunió con referentes del resto de los bloques, que terminaron de definirse ese día con la elección de Luis Juez como jefe del PRO. También se entrevistó con el salteño Juan Carlos Romero, quien -como adelantó Letra P- después del ballotage le acercó a la vice un esquema de consenso para excluir al peronismo, que es el que finalmente se aplicaría este miércoles.
Aun con los números cerrados, referentes de LLA en el Senado preferían ser cautos. "Queda un día y pueden aparecer pretensiones nuevas. Pero, por lo pronto, tendríamos que ganar", señaló una de las autoridades del bloque. Villarruel cree que tiene los votos para ganar y convocó a la sesión.
¿Minoría peronista en comisiones?
Más importante que elegir las autoridades de la Cámara será para Villarruel definir un esquema de reparto de las vocalías en las comisiones, para que UP quede en minoría en todas y no pueda exigir ninguna presidencia. La vice quiere liderar las cuatro consideradas "de gestión": Acuerdos, Presupuesto, Asuntos Constitucionales y Relaciones Exteriores.
Según el esquema acordado en la reunión de labor parlamentaria, el grupo no peronista se repartiría 11 vocalías en las comisiones que tienen 19 miembros y 10 en las que tienen 17. El mismo esquema se aplicará para las bicamerales, como la de trámite legislativo, la que más le interesa controlar al presidente.
El triunfo de Villarruel también podría influir en la agenda legislativa del Gobierno. Se especula que los proyectos que no tengan componentes impositivos sean enviados al Senado. La vicepresidenta tal vez tenga una mayoría para ofrecer.