Horas antes del arribo de Sergio Massa a la provincia de La Rioja, el oficialismo que conduce el gobernador Ricardo Quintela se esperanza con mejorar la performance del 13 de agosto y conseguir un aporte clave para el mapa político que se conformará a partir del 10 de diciembre. El objetivo es mantener las dos bancas que hoy ostenta en el Senado de la Nación y que, en adelante, presentará un panorama en el que las mayorías y las minorías deberán trabajarse quirúrgicamente.
En las últimas horas, el exintendente de capital provincial y candidato a senador por Hacemos por Nuestro País, Alberto Paredes Urquiza, deslizó la posibilidad de dar de baja su candidatura. En consecuencia, el peronismo riojano se preparara para presentarse como un dique de contención para los 10.356 votos que quedarían sin candidato, al menos en ese tramo de la boleta.
Aunque en diálogo con Letra P, Paredes Urquiza asegura que “son análisis muy erróneos” pensar en algún tipo de “arreglo con el gobierno”, la cantidad de votos cosechados y la dispersión de votos que eso generaría levanta la expectativa en el peronismo de Unión por la Patria. En ese tramo puntual de la lista de la Libertad Avanza, que encabeza Juan Carlos Pagotto, obtuvo 65.670, mientras que Unión por la Patria, que lleva como primera candidata a la vicegobernadora Florencia López, cosechó 63.304. Muy atrás, la suma de las listas de Juntos por el Cambio apenas llegó a los 39 mil votos.
En ese panorama, la discusión es por una diferencia de 2.366 sufragios y definirá si el peronismo sostiene sus dos bancas, sumando al próximo Congreso al actual ministro de Producción, Fernando Rejal; o si La Libertad Avanza vuelve a imponerse y debuta en el Senado con dos bancas riojanas. En ese caso Claudia Cecilia López se sumaría a la Cámara Alta a partir de diciembre. Otra pata de la estrategia que surge de la campaña provincial tiene que ver con la participación, que fue del 68,14%. Hay casi 97 mil riojanos y riojanas que no votaron, mientras que más de 6.000 lo hicieron en blanco.
La decisión del candidato de Hacemos por Nuestro País se tomará el próximo viernes, en una reunión en la que participen los diferentes representantes del espacio en La Rioja. El debate por el voto peronista que tiene en Córdoba su foco de tensión más evidente empieza a replicarse en todo el país y encuentra un nuevo territorio que se pone en el centro de todas las miradas justo en el lugar en el que Quintela aseguró que evaluaba la posibilidad de renunciar a su cargo en caso de que Javier Milei era elegido Presidente.
“Nuestros votos jamás se irían con Massa. Es más, siempre dejamos en claro que nuestro apoyo a la candidatura de Juan Schiaretti se mantendrá firme, incluso en caso de declinar nuestras candidaturas”, dice consultado por este medio.
Paredes Urquiza llegó al equipo de Schiaretti y Florencio Randazzo a partir de la alianza del cordobesismo con el Partido Demócrata Cristiano. Se reconoce como “peronista de Perón”, pero fue ese el sello que lo cobijó tras su discusión con el actual oficialismo riojano. Por esa razón, fue Juan Brügge, tercero en la lista de candidatos a la Cámara de Diputados por Córdoba y último demócrata cristiano en ocupar una banca en el Congreso de la Nación, entre 2015 y 2019, el que ofició como principal armador en la provincia.
De hecho, el todavía candidato asume no haber hablado nunca con el gobernador de Córdoba y haber tenido un contacto con Alejandra Vigo, una de las principales espadas nacionales del schiarettismo, con motivo de una visita de la senadora a La Rioja en la previa a las PASO.
Llamado de atención
El argumento central del exintendente de la capital riojana se sustenta en un llamado de atención que exige un mayor “apoyo político” para la campaña en la provincia. La lectura primaria hace referencia a la necesidad de recursos, pero también “a la voluntad política que manifieste la gente de Córdoba (sic)".
“Si ellos nos siguen apoyando será importante para que podamos seguir”, dice y específica: “Apoyo político de estar presentes en la campaña en La Rioja, que venga Schiaretti, que nos acompañe aquí. Eso es el apoyo político”, redunda Paredes Urquiza.
Como ya contó Letra P, la provincia gobernada por Quintela aparece en el mapa estratégico de Hacemos por Nuestro País, aunque todavía no está definida la hoja de ruta que podría marcar un eventual desembarco de los candidatos nacionales en el territorio. Schiaretti y Randazzo obtuvieron allí casi 14 mil votos y, en porcentualmente fue el distrito en que mejor performance se obtuvo detrás de Córdoba.
De todos modos, las listas que disputan espacios para Diputados y el Senado quedaron demasiado rezagadas en un panorama marcado por la “elección de tercios” que, en La Rioja, ya le comió un senador a Juntos por el Cambio.