La empresa de Mark Zuckerberg restringió la creación de ilustraciones con inteligencia artificial para garantizar "respeto y neutralidad". El contraste con Twitter.
Mark Zuckerberg, CEO de Meta, dueña de Facebook, Instagram y WhatsApp.
La empresa Meta, liderada por Mark Zuckerberg y propietaria de Facebook, Instagram y WhatsApp, limitó la generación de imágenes de figuras políticas con su inteligencia artificial (IA) para "evitar la creación y difusión de contenido que pueda ser considerado sensible, ofensivo o dañino". El contraste con Twitter, renombrado X por Elon Musk, es notable.
Al cierre de esta nota, la compañía no quiso responder sobre el tema a la consulta de Letra P, pero fuentes del sector aseguraron que la Meta IA proporcionaría "la mejor respuesta", la misma a la que tiene acceso cualquier persona con WhatsApp.
"La generación de imágenes de políticos y políticas contemporáneas puede ser considerada sensible o potencialmente dañina, ya que puede ser utilizada para crear contenido engañoso, difamatorio o manipulado", respondió el algoritmo y enumeró cuatro razones para limitar la generación de este tipo de imágenes:
"Derechos de autor y privacidad"
"Desinformación y manipulación"
"Neutralidad política"
"Respeto y dignidad"
En ausencia de la empresa, la IA detalló que "los equipos de ética y responsabilidad de Meta trabajan para establecer directrices y políticas que garanticen el uso responsable y ético de estas tecnologías". En la misma línea, la IA remarcó que estos límites "son el resultado de un proceso de reflexión y debate interno".
La ética de Meta no fue siempre la misma. En 2018, el diario británico The Observer informó que la compañía de análisis de datos Cambridge Analytica había usado los datos de 50 millones de cuentas de Facebook a actividades ajenas a la red social para favorecer la campaña electoral de Donald Trump en Estados Unidos en 2016.
El caso llegó a la Justicia de Estados Unidos impulsado por las personas afectadas y en 2022 Zuckerberg acordó pagar U$S 725 millones como indemnización por el uso no consentido de datos. La empresa ya había pagado U$S 5.000 millones a la Comisión Federal de Comercio y otros U$S 100 millones a la Comisión de Bolsa y Valores en el marco de la misma causa.
"Durante los últimos tres años, renovamos nuestro enfoque de la privacidad e implementamos un programa integral de privacidad", había explicado la empresa hace dos años.
La Justicia también intentó llegar a Twitter, pero la compañía huyó del país gobernado por Lula da Silva. Cuando el juez del Supremo Tribunal Federal, Alexandre de Moraes, ordenó a X bloquear cuentas que difundían noticias falsas y replicaban discursos violentos durante el gobierno de Jair Bolsonaro, Musk retiró las oficinas de la compañía de Brasil y acusó a Moraes de amenazar a la representante legal de la empresa Rachel Nova Conceição con arrestarla si no cumplía las órdenes judiciales.
Bolsonaro no es un caso aislado de la ultraderecha internacional. Musk pagó U$S 44.000 por Twitter en 2022, un año después de que el expresidente de Estados Unidos Donald Trump tuiteara por última vez luego de que lo suspendieran en 2020 y sus seguidores asaltaran el Capitolio. El ex jefe de Estado prefirió crear su propia red social con sus reglas, Truth Social, y refugiarse allí hasta este año cuando el nuevo dueño lo recibió con una entrevista.
El exmandatario estadounidense consideró este lunes incluir al dueño de Tesla en su gabinete o, al menos, tenerlo como asesor. “En donde le gustaría involucrarse es en reducir parte de los gastos innecesarios, y sabe cómo hacerlo”, remarcó Trump en una entrevista con el exmilitar Shawn Ryan.
El gobierno de Argentina también tiene un vínculo fortalecido con esta red social que el presidente Javier Milei habita y usa con frecuencia y donde publicará su docuserie. Daniel Parisini, conocido como Gordo Dan, uno de los referentes de la comunidad libertaria y fundador del canal de streaming Carajo fue premiado como "El más influyente de X" en los Martin Fierro Digital y durante su discurso de triunfo definió Twitter como "la red social más tóxica y la peor cloaca de Argentina".