Tras más de 18 horas de debate, La Libertad Avanza logró aprobar en general este martes la ley ómnibus, con respaldo del PRO y de aliados de la oposición dialoguista, que fueron un sector de la UCR, de Hacemos Coalición Federal y partidos provinciales, que le permitieron llegar a 142 votos.
Hubo 106 rechazos, de los bloques Unión por la Patria, la izquierda, el socialismo santafesino y Natalia De la Sota, de HCF. La Coalición Cívica, que abandonó esta última bancada antes de iniciar la sesión, votó a favor y se opondría a algunos artículos. Sólo se abstuvo Mónica Frade.
El radicalismo se dividió, pero no hubo votos negativos, sino cuatro abstenciones: Pablo Juliano, Marcela Coli, Facundo Manes y Fernando Carbajal. En las próximas horas se tratará el contenido de los proyectos, que se votarán por capítulos, a partir de una decisión que tomó la mayoría del recinto al inicio de la sesión este lunes. Maximiliano Ferraro, de la Coalición Cívica, y el jefe de Unión por la Patria, Germán Martínez, exigieron votar artículos por separado. Martín Menem no lo aceptó.
A la hora de la votación, estuvieron ausentes Alvaro González (PRO), Roberto Mirabella (UP) y el santacruceño Sergio Acevedo, alineado con su gobernador, Claudio Vidal.
El Gobierno negoció hasta la madrugada para evitar que se cayeran algunos artículos, como la reforma del Estado -eje central del capítulo de facultades delegadas-, el Régimen Nacional de Inversiones (RIGI).
Luego se votará la forma fiscal, que se debatió en forma simultánea, y también tiene algunos capítulos con escaso respaldo, como la reversión de Ganancias y el blanqueo.
El Ejecutivo confía en que no tendrán problemas en ser aprobados, aunque en algunos artículos podría tener los votos justos. El ministro del Interior, Guillermo Francos, y Karina Milei visitaron la cámara baja en varias oportunidades para chequear que el oficialismo contara con los votos necesarios para pasar la prueba.