La diputada María Eugenia Vidal quedó nuevamente en el centro de la escena PRO al convertirse en la llave para destrabar el conflicto de mayor intensidad que el partido amarillo enfrenta por estas horas: la elección en la Ciudad. En ello coinciden los integrantes de la cúpula del partido que este viernes compartieron desayuno en la casa del exministro de Trabajo Jorge Triaca. La parábola de La Leona se inició con una candidatura presidencial forzada que terminó quedándole demasiado incómoda y acaso termine con el premio enorme para ella de heredar el reino amarillo porteño. De mínima, la posibilidad de su corrimiento –otro más– ayuda a “calmar las aguas” en una interna feroz.
Frente al expresidente Mauricio Macri, la jefa del team halcón Patricia Bullrich y su adversario directo, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta; los diputados Diego Santilli, Cristian Ritondo y Federico Angelini y el exsecretario general de la Presidencia Fernando de Andreis, la exgobernadora bonaerense dejó en claro su postura: no descarta calzarse el traje de candidata en la Ciudad. La mesa acordó luego que, a las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), deben llegar con un candidato de consenso para evitar dividir el voto.
La decisión final será de Vidal, quien, como contó Letra P, también deja la puerta abierta a negociar la presidencia de la Cámara de Diputados. Su elección será el final de un recorrido que se inició con el Plan Canje de Larreta en 2021 –que incluyó el retorno de la exgobernadora a la Ciudad y la mudanza de Santilli a Buenos Aires– y la decisión de Macri de subirla a la pelea por el sillón de Rivadavia. La decisión -se sabe- está atravesada por otra incomodidad, el futuro de Jorge Macri, el ministro de Gobierno que dejó en comodato la intendencia de Vicente López y se mudó al otro lado de la General Paz persiguiendo el sueño de suceder al alcalde.
https://twitter.com/proargentina/status/1651946213934022659
Por si acaso, el primo Jorge ya avisó que no se bajará de la contienda electoral, en la que –dicen– por el momento es favorito.
Alerta ultraderecha
Vidal no fue el único tema central de la reunión de este viernes en San Isidro. En el PRO preocupa el daño que puede causar la interna en sus candidatos y candidatas. Temen estar alimentando el crecimiento de Javier Milei. De ahí, la necesidad de dar una imagen de unidad.
La posición de cada una de las figuras en la foto difundida luego del desayuno no fue aleatoria. Macri y Larreta, que mantienen un enfrentamiento abierto no sólo por la conducción del partido sino también por la de la coalición Juntos por el Cambio (JxC), fueron ubicado en el centro de la imagen con la intención de mostrar que, a pesar de sus diferencias, tienen un objetivo común.
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Macri, como el resto de la dirigencia que se sentó a la mesa, está convencido de que lo que resta calcular es cuándo explotaría “la bomba económica” que gesta el Frente de Todos (FdT) y que para eso se necesita poder manejar las expectativas en el caso de que la crisis entre en una meseta hasta diciembre. Entienden como una necesidad urgente mostrar los planes que elaboran para tal ocasión.
Libertario adentro
Como contó Letra P, la inclusión de José Luis Espert en JxC también fue un tema de discusión. Se acordó convocar formalmente al diputado para que blanquee sus intenciones electorales. “No es lo mismo que quiera ser candidato a presidente o a gobernador”, destacó uno de los dirigentes que participó del desayuno.
Espert ya hizo su lanzamiento formal en la carrera por la gobernación de Buenos Aires, pero la necesidad de que ratifique o rectifique su intención se debe a que en el distrito del 38% del padrón no quieren alteraciones en la interna que Santilli y Ritondo libran de manera pacífica. La propia Bullrich colaboró con esa paz el jueves, cuando, ante la mesa provincial del macrismo, aceptó la estrategia de la “V” en los municipios que gobierna el partido, aunque con la condición de que se le garantice igualdad de condiciones en la competencia con Larreta.
“Si Vidal se baja, Ritondo puede acordar con Bullrich o negociar con Santilli. Ahí no hay problemas”, agregó otro de los comensales de este viernes y remarcó que toda la discusión de la interna bonaerense entre los diputados no tuvo el nivel de belicosidad que sí tiene la nacional. “Es mucho más fácil que se acerquen”, sentenció.