El acto de Unión por la Patria en el Hipódromo de Tucumán fue un típico encuentro peronista, multitudinario, en el que no faltaron los choripanes, el mar de banderas multicolores que respondían a distintos sectores de la dirigencia y el ir y venir de columnas de sindicatos que lograron abrirse paso en la concentración para ubicarse frente al escenario para agasajar a Sergio Massa. El gobernador Juan Manzur, que ofició de anfitrión para el candidato presidencial y a quien se le encargó lograr el mejor resultado posible para el oficialismo en el Norte Grande, cumplió y los intendentes, legisladores, concejales, diputados y senadores garantizaron una fuerte presencia de la militancia. Una bocanada de oxígeno que necesitaba el peronismo territorial para mostrar músculo, a 43 días de las elecciones nacionales del 22 de octubre, cuyo principal objetivo es entrar al ballotage.
Manzur no debía fallar, tenía que recuperarse de la derrota en las primarias de agosto, cuando el peronismo tucumano perdió por tres puntos frente al aluvión electoral de Javier Milei, de La Libertad Avanza. El exjefe de Gabinete se sacudió del revolcón que supuso haberse quedado afuera de la fórmula presidencial y se encendió hace tres semanas para ponerse el frente del operativo de recuperación de votos.
El mandatario reunió por separado a intendentes y a sus dirigentes más cercanos, coordinado con el gobernador electo, Osvaldo Jaldo; y habló con ministros del gabinete nacional, sus pares del Norte Grande, dirigentes de la CGT y de movimientos sociales. Logró dejarle una postal al candidato a Presidente de Unión por la Patria (UP) con la esperanza de que el peronismo es capaz de recuperarse. Es un mensaje para afuera de la provincia, pero también para adentro, para convencer a la militancia que es posible darla vuelta, aún en un contexto económico con dificultades.
Solo hablaron Manzur y Massa en el acto, cuyos discursos arrancaron alrededor de las 15.30. Tres horas antes ya habían llegado al Hipódromo numerosos dirigentes. Los intendentes también cumplieron y estuvieron desde temprano. Hubo carteles y banderas de Javier Noguera, de Tafí Viejo; Carlos Najar, de Las Talitas; Darío Monteros, de Banda del Río Salí; Aldo Salomón, de Alderetes; Carlos Gallia, de Lules; Francisco Serra, de Monteros; Elia Fernández, de Aguilares y Marcelo Herrera, de Simoca. Este último, también encabezó, vestido para la ocasión, una delegación de agrupaciones gauchas que llegaron a caballo. "La Patria también se hizo a lomo de caballos, de mulas y con el valor de nuestros gauchos", clamaba a los cuatro vientos a quien se le acercaba para saludarlo.
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También participaron e hicieron sentir su presencia algunos dirigentes provinciales de estrecha relación con Manzur, como Carlos Assán, secretario de Saneamiento y Mejoramiento de Espacios Públicos de la provincia, cuya fuerza es conocida en Tucumán como la "marea verde". Además, movilizaron Gerónimo Vargas Aignasse, Jefe Regional del Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (Enohsa) y legislador provincial electo; la ministra de Gobierno y Justicia de la provincia, Carolina Vargas Aignasse, también parlamentaria provincial electa; el legislador provincial Armando "Cacho" Cortalezzi; y el diputado nacional Mario Leito.
Sin embargo, gran parte del color y el volumen de los cánticos fueron agitados por los integrantes de gremios, como UPCN, la regional de la CGT y La Bancaria. En este último caso, el secretario general nacional Sergio Palazzo y el diputado nacional Carlos Cisneros, miembro de la conducción nacional, optaron por quedarse junto a la militancia, desde donde siguieron los discursos.
Desde el palco, los locutores informaron que la concentración superó las 100.000 personas. Con esa cifra, fue el acto más importante del peronismo provincial, desde el 17 de octubre de 2018. Aquel Día de la Lealtad, también en el Hipódromo tucumano, Manzur dio el puntapié para que el PJ comenzara a encolumnarse hasta lograr el triunfo en las elecciones nacionales del año siguiente. Es un recuerdo que anima las esperanzas de una dirigencia que -admitió ante Massa- fue sorprendida por la ola violeta de Javier Milei. Su siguiente prueba, quizás la más importante a la vista, será entrar al ballotage en octubre.