El mandatario entrerriano lidera en imagen positiva entre sus pares y, con casi un tercio del electorado que aún no lo conoce, es quien más puede crecer.
Rogelio Frigerio mira de lejos la debacle porteña del PRO.
Con 35% de imagen positiva y apenas 23% de imagen negativa, el gobernador de Entre Ríos, Rogelio Frigerio, encabeza el ranking de imagen entre mandatarios subnacionales, según la consultora Isasi-Burdman.
Según el estudio nacional de la consultora Isasi-Burdman, realizado en mayo, Rogelio Frigerio es el gobernador con mayor imagen positiva del país (35%), superando con claridad al resto de los mandatarios provinciales evaluados. A esto se suma un dato clave: 29% de los encuestados respondieron “no sabe”, lo que marca una alta posibilidad de crecimiento para el dirigente, que aún conserva un perfil moderado en el plano nacional.
El informe comparó la imagen de cuatro gobernadores con proyección nacional. Detrás de Frigerio se ubica Maximiliano Pullaro, con 28% positiva y 25% negativa, seguido por Jorge Macri (26% positiva, 39% negativa) y Martín Llaryora (23% positiva, 25% negativa). Frigerio no solo tiene el mejor nivel de imagen positiva, sino también el diferencial más alto entre imagen favorable y desfavorable.
Con un 29% de desconocimiento, Frigerio es el segundo menos conocido del grupo, detrás de Llaryora (36%), pero con una combinación más favorable: su imagen positiva supera con amplitud a su rechazo, mientras que en los otros casos las valoraciones están más equilibradas o incluso dominadas por la imagen negativa, como en el caso del jefe de Gobierno porteño.
El 23% de imagen negativa que registra Frigerio es el más bajo del conjunto, igualado solo por Llaryora, pero con una diferencia a favor: Frigerio es mucho más valorado positivamente (35% contra 23%). Esta ecuación lo convierte en un activo político con capacidad de crecer en visibilidad y respaldo si decide nacionalizar su perfil en los próximos años.
En un contexto de desgaste de las principales figuras de la oposición, como Cristina Fernández de Kirchner o Axel Kicillof, que arrastran altos niveles de rechazo, Frigerio aparece como un posible referente de una renovación opositora más moderada. Su experiencia en el Gobierno nacional durante la presidencia de Mauricio Macri, sumada a su gestión actual en Entre Ríos, le otorgan credenciales ejecutivas y proyección institucional.
Los datos del informe no miden intención de voto, pero sí posicionamiento. En ese plano, Frigerio aparece mejor parado que cualquier otro gobernador medido. Si logra convertir su imagen favorable y bajo rechazo en conocimiento efectivo, puede transformarse en una figura competitiva en escenarios electorales nacionales de cara a 2027.