El batacazo libertario de este domingo suma presión al gobernador Axel Kicillof, padre del desdoblamiento electoral con el que muchos mandatarios buscaron provincializar los comicios, una estrategia que al macrismo no le funcionó. En la Ciudad pasó lo que Cristina Fernández de Kirchner viene pronosticando para la provincia de Buenos Aires: es imposible desnacionalizar las elecciones.
Por si fueran pocas malas noticias para el oficialismo bonaerense, el triunfo de Las Fuerzas del Cielo empuja una estampida de dirigentes del PRO hacia el mileísmo, pésima noticia para el peronismo que necesitará más que nunca encontrar las vías que lleven a la unidad.
La Cámpora traspola la elección porteña a la bonaerense y analiza que el resultado es una muestra de que la expresidenta tenía razón cuando decía que no había que despegar los comicios de los nacionales. Cerca del gobernador rechazan esa lectura y piden mirar lo ocurrido en las provincias que ya tuvieron elecciones donde los oficialismos ganaron.
¿CABA le da la razón a CFK?
Las primeras voces camporistas y aliadas al cristianismo escuchadas en la mañana de este lunes fueron contra Kicillof. “Nos fue bárbaro desdoblando y escondiendo a CFK”, dice con ironía un dirigente de la agrupación liderada por Máximo Kirchner sobre las implicancias que el resultado podría tener en la provincia.
“Esperemos, vamos a rezar para que todos los involucrados tomen nota de lo que está pasando por el bien de todos. Hasta ahora es evidente que el desdoblamiento no está ayudando en nada”, insistió la fuente a Letra P.
“Vamos a ver que tal funciona en la provincia la brillante idea de desdoblar”, ironizó otro dirigente, con asiento en el oeste del conurbano. “En CABA pasó lo que Cristina le anticipó a Axel: nacionalizaron la elección y salieron favorecidos. Lo vas a tener a Milei recorriendo todos los días la provincia validando la baja de la inflación y fustigando por la delincuencia, ojalá que (Jorge) Ferraresi y (Fernando) Espinoza tengan buenas respuestas para dar”.
Para Axel Kicillof, CABA no es la PBA
Cerca del gobernador rechazan el análisis cristinista. El caso porteño “no es extrapolable” a la provincia, aseguró el ministro de Gobierno, Carlos Bianco. “No tiene nada que ver”, insistió y marcó que “la situación política de la Ciudad de Buenos Aires dista mucho de lo que pasa en la provincia de Buenos Aires”.
Carlos Bianco en conferencia de prensa (2).JPG
“Salvo en algunos lugares del primer cordón, no tiene mucho que ver la representación política de los porteños con la de los bonaerenses. Ese es el análisis que llevamos nosotros, pero igual toda está información sirve para llevar adelante el proceso electoral en la provincia de Buenos Aires”, dijo.
“El desdoblamiento fue positivo en las cinco provincias en las que hubo elecciones”, dijo alguien del entorno más cercano al gobernador ante la consulta de este medio y apuntó: “No leí qué planteo hicieron Máximo y La Cámpora en las elecciones de Santa Fe, Salta, Jujuy, San Luis y Chaco”. Más: “Nosotros tenemos que ganar dos veces. Esa es nuestra mirada. Cuidar a los municipios de La Libertad Avanza y ganar en octubre cuando Milei se va a fortalecer”.
Preocupación compartida por la baja participación
Hay algo que sí comparten ambas tribus: la preocupación por la baja participación de la ciudadanía en los comicios. En la Ciudad, este domingo votó menos del 54% de las personas habilitadas para votar, lo que grafica el divorcio de la gente con la dirigencia política, sin distinción de colores partidarios.
“Hay una preocupación que es la falta de interés de una parte de la población de participar de las elecciones”, dijo Bianco y reconoció que esa situación los “preocupa muchísimo”. “Lo vamos a trabajar mucho a través de la divulgación y con todos los intendentes”, afirmó.
La misma línea siguió la senadora cristinista Teresa García. “Lo más preocupante para mí de toda la elección, más allá del resultado, es lo que se viene notando como tendencia, la baja asistencia de los votantes”, indicó.
“Yo vengo siguiendo desde la elección de Santa Fe, más la del norte argentino de hace dos domingos, y es notoria la baja afluencia de votantes, cosa que preocupa porque, insisto, si la gente va a votar, uno acepta los resultados, el tema es que estemos en un nivel tan bajo”, agregó.