Lanzó su propio espacio político y busca construir una alternativa a LLA y el kirchnerismo. Reuniones y acercamiento con los gobernadores de JxC.
Horacio Rodríguez Larreta
Con bajo perfil, Horacio Rodríguez Larreta acelera su construcción política, pero duda en competir en las elecciones legislativas de 2025. Con un video, reapareció este martes en la escena política y lanzó Movimiento al Desarrollo (MAD), su propio think tank desde donde posicionarse con ideas de centro con el desarrollismo como concepto principal.
El exjefe de Gobierno porteño, quien la semana pasada se reunió con el diputado Emilio Monzó, cree que "no es momento" de enfrentar electoralmente al presidente Javier Milei y lo mismo le recomienda a los dirigentes sin referencia partidaria. No quiere quedar atrapado en la pelea entre La Libertad Avanza y el kirchnerismo. Además, piensa que la popularidad de Milei no mermará hasta diciembre del año próximo.
"No hay que apurarse, ni mostrar las cartas de forma anticipada porque es hacerle el juego a Milei", le dijo Larreta a sus colaboradores la semana pasada. El excandidato presidencial de Juntos por el Cambio sigue en las filas del PRO, pero alejado de la centralidad del partido y de las discusiones en torno a una posible fusión con el oficialismo.
Larreta quiere evitar el desgaste de su armado político y por eso esquiva las fotos con dirigentes del espacio de centro, como el exgobernador de Córdoba, Juan Schiaretti. La derrota en las PASO ante Patricia Bullrich le sirvió para darse cuenta de que apresurar los tiempos puede jugarle en contra. "Tuve el álbum de fotos más completo con dirigentes de todos los espacios pero no me aportó ni un voto", afirmo el exjefe de Gobierno.
Otro de los motivos para frenar cualquier avance público de la construcción de ese espacio de centro es que las elecciones de 2025 son distritales y no tienen un efecto ordenador como las presidenciales. "Cuando se sumen los votos de todos los dirigentes que pensamos de la misma forma, recién ahí se podrá ordenar todo", le dijo, a Letra P, un larretista.
Sin decirlo abiertamente, Larreta mira con atención el desempeño que puedan tener en sus respectivas provincias los gobernadores Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Maximiliano Pullaro (Santa Fe), Marcelo Orrego (San Juan) y Claudio Poggi (San Luis), entre otros. "Si nos mostramos, nos van a decir que somos casta. No es el momento", agregó otro integrante de la mesa chica del exjefe de Gobierno.
Además, los dirigentes que tienen roles de gestión prefieren mostrarse abocados a la gestión y no en la política partidaria. De hecho, los gobernadores de JxC pusieron en stand by las negociaciones con LLA para un acuerdo en 2025 en las elecciones de medio término.
En paralelo con ese armado, Larreta seguirá exponiendo su postura en temas puntuales, como la fórmula de actualización de los haberes jubilatorios, pero evitará ser un "comentarista" de la actualidad. Asimismo, seguirá con su estrategia de potenciar su imagen como "gestor" y "solucionador de problemas" mediante las conferencias que les da a los equipos de gobernadores e intendentes.
La relación con Macri es otro de los temas que Larreta busca cerrar. Sin margen para recuperar el vínculo, Larreta cree que el fundador del PRO le está entregando el partido a Milei y LLA. "No voy a ser parte de eso", repite el exjefe de Gobierno porteño. Por ahora, la posibilidad de reconciliación está muy lejos.