El gobernador amarillo se reunió con la secretaria general de la Presidencia antes del relanzamiento PRO en La Boca. Primera puntada para una posible coalición.
Rogelio Frigerio y Karina Milei en Casa Rosada.
Rogelio Frigerio y Karina Milei tuvieron un encuentro cara a cara este jueves en la Casa Rosada. La reunión fue fundamentalmente política. El gobernador de Entre Ríos y la secretaria General de la Presidencia saben que si no unen fuerzas en la provincia pueden dividir el voto y entregar una banca en el Senado ante el PJ.
Antes del acto de Mauricio Macri en La Boca e inmediatamente después de la reunión de los gobernadores de Juntos por el Cambio con el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, el mandamás de Juntos por Entre Ríos (JxER) se encontró a solas con la arquitecta del armado partidario libertario en todo el país, que en la provincia es incipiente. Fue horas antes de que el titular del PRO cuestionara en su discurso al entorno presidencial.
En el PRO entrerriano y también en La Libertad Avanza (LLA) saben, en base encuestas y estudios de campo, que Frigerio está bien posicionado en la consideración de la ciudadanía. También coinciden en que existe un riesgo, pensando en el escenario electoral de 2025, de dividir al mismo electorado beneficiando al peronismo, que en caso de lograr un triunfo en las legislativas podría alzarse con los dos escaños por la mayoría, arrebatándole al menos uno de los dos que hoy tiene el oficialismo provincial en manos de Alfredo de Angeli (PRO) y Stella Maris Olalla (UCR).
Cerca del gobernador revelaron que el encuentro fue bueno. También aclararon, con énfasis, que este fue un primer acercamiento y que resta camino por recorrer, pero que existe un objetivo en común que facilita el proceso. “Compartimos el mismo norte”, es la frase que repite una y otra vez Frigerio.
Así, en la reunión de este jueves se comenzó a explorar cuál es la mejor estrategia electoral de cara a 2025. En este contexto, tanto Frigerio como Macri, recién asumido como presidente del PRO, coinciden en rechazar una fusión con LLA.
Sin embargo, en un contexto donde la discusión se dará distrito por distrito, con el pragmatismo como bandera, esta postura no es incompatible con una coalición electoral para competir en las elecciones legislativas de medio término.
De lo que se trata por ahora es de caminar en conjunto, dicen cerca del mandatario provincial. Acercar posiciones, limar eventuales diferencias, conversar y mostrar coincidencias, que es algo que para el mandatario entrerriano se da naturalmente. “Hay que dejar la puerta abierta a confluir”, metaforizó un colaborador de Frigerio. “Total, si después no se puede, no hay problema”, agregó, explicando la estrategia.
En la reunión, Frigerio le transmitió a la hermana presidencial que ve positivamente que Javier Milei cuente con un partido propio para competir el año próximo. De igual modo, con la figura de la alianza electoral pueden caminar juntos la provincia durante la próxima campaña.
Por otro lado, cualquier consulta que se haga en el entorno del mandatario entrerriano sobre las determinaciones que puedan tomarse en el plano político partidario van antecedidas por una aclaración: “Rogelio está más preocupado por la gestión que por el escenario electoral en la provincia”. Aquí también radica la importancia de la foto difundida. Su equipo se cuida meticulosamente de no dar mensajes que lo muestren enroscado en la política, aunque en este caso sí lo ameritaba.
La evaluación que hace el oficialismo provincial es que el peronismo sigue golpeado después de haber sido despojado del poder luego de 20 años de ejercerlo en la Casa Gris. Ante la desorganización interna y falta de liderazgos definidos y sólidos, entienden, no pueden perderse la oportunidad de mostrar avales de administración de gobierno para seguir al mando. Lo electoral, leen, será un correlato.
Si bien todo es tan reciente como vertiginoso, la foto de Karina Milei y Frigerio ya despertó consultas tanto en las huestes mileístas como en la UCR, socia del PRO en el Ejecutivo entrerriano. Las primeras tienen menos chances de resistir una confluencia electoral, por disciplina libertaria.
En tanto, en el bando boinablanca puede haber resistencias a una confluencia. Si bien sus bloques en el Congreso vienen acompañando las leyes del Ejecutivo, una alianza con LLA podría desdibujar aún más al radicalismo. Además, los lugares en disputa son finitos, en tanto que las expectativas para llegar a una banca son muchas más.