"Agenda abierta". Con el heterogéneo territorio argentino representado en sus 24 gobernadores, en un mapa homogéneo en términos de género, Javier Milei los recibirá este mediodía en el salón Eva Perón de la Casa Rosada para hablar de un temario amplio, pero con las repercusiones del Caputazo en las arcas provinciales como telón de fondo. Con la reforma del Impuesto a las Ganancias, heredada de la gestión massista y votada por el Presidente en su calidad de diputado suscrito a la escuela austríaca de pensamiento, el bonaerense Axel Kicillof-que comulga otras ideas económicas- se erigió como vocero para reclamar "sustituir o compensar" el impacto de perder esos recursos coparticipables, a cambio de no restituir el gravamen.
El costo político a pagar en caso de la marcha atrás se suma a la ironía ideológica de subir impuestos para un liberal libertario. Estos parámetros están siendo analizados por la administración mileísta. El ministro del Interior, Guillermo Francos, protagonizó un prólogo el viernes pasado, con un puñado de mandatarios in situ y el resto por Zoom. En Balcarce 50 admiten que un grupo de ellos reclaman bajar el piso de Ganancias, un tema abierto que se tratará en la mesa este martes. Curioso operativo clamor, pero no inédito, lo de borrar con el codo lo que se escribió con la mano poco antes.
Por ahora, los mandatarios no se mueven como un único actor político, apenas disimulados por el amparo partidario. Los peronistas dejan caminar al Gobierno, algunos a la espera de un tropiezo y otros bajo la figura de una oposición "responsable"; mientras que Juntos por el Cambio le escapa a la idea de un cogobierno producto del Pacto de Acassuso. Más claras parecen ser las agendas regionales, en las que comienzan a emerger un bloque patagónico con sus preocupaciones, otro de centro y el ya clásico del Norte Grande, que tiene un decálogo económico propio que busca instalar durante todo gobierno nacional.
La administración de Alberto Fernández envió un proyecto -que fue aprobado- para elevar el mínimo no imponible a 15 salarios mínimos, vitales y móviles; lo que se tradujo en que 800.000 personas -una cifra que el Frente de Todos repitió en campaña- dejaron de estar alcanzadas por el impuesto.
La tríada oficial para agasajar a los gobernadores la completará el jefe de Gabinete, Nicolás Posse. No estará, a priori, el ministro de Economía, Toto Caputo, el responsable de las medidas que llevó preocupación a las provincias, pero además el que acaparó el reparto de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN), un goteo discrecional que ya anticipó que quedará reducido al "mínimo" comparado con otras épocas.
https://publish.twitter.com/oembed?url=https%3A%2F%2Ftwitter.com%2FGAFrancosOk%2Fstatus%2F1735811861214290062&partner=&hide_thread=false
El convite promete ser austero. "El Presidente les va a explicar la situación del país y les va a pedir un esfuerzo compartido", adelantaron fuentes oficiales, evitando deslizar demasiados detalles. A la motosierra se le sumará un spoiler de lo que vendrá: las propuestas que el Ejecutivo enviará al Congreso, un paquete de reformas (de ley ómnibus pasó a ser varias combis) cuyos detalles están guardados bajo siete llaves, algunas en el cajón de Federico Sturzenegger.
Hay dos proyectos que filtraron que el Gobierno pondrá sobre la mesa y que Francos viene agitando desde la semana pasada: la eliminación de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) y la Boleta Única, con un proyecto que duerme el sueño de los justos en el Senado. El ministro mileísta llevó la inquietud el miércoles pasado a la Cámara Nacional Electoral, con el reclamo de “ajustarse a la realidad y ver de qué manera hacemos más eficiente también el sistema electoral”.
Con temario incierto, más allá de algunos puntos que se caen de maduro, Milei buscará el desahogo de los mandatarios, en el primer cara a cara de los electos en 2023. Como el libertario, no pocos de ellos enfrentan también sus respectivas "pesadas herencias", a las que contraponen con sus propias versiones de motosierras. "Cualquiera de ellos pueden venir con problemáticas locales puntuales, que hagan a su provincia", se preparan en la Casa Rosada para escuchar un variopinto rosario de desgracias.
La clave para el gobierno libertario es la foto, el primer encuentro político de alto voltaje de un Presidente que militó contra la casta. Es casi parte de una tradición: en 2015, Mauricio Macri citó por primera vez a los mandatarios de todos los colores en la Quinta de Olivos dos días después de asumir; y Fernández los reunió en la Casa Rosada el 17 de diciembre de 2019, para acordar la suspensión del pacto fiscal que habían suscripto con su antecesor. Un antecedente para explicar cualquier tipo de revisión a una reforma de Ganancias que complica las arcas provinciales en pleno ajuste.
La novedad es que ninguno de los 24 que verán este martes a Milei le debe su banda y bastón a La Libertad Avanza.