La tormenta de acusaciones que Elisa Carrió lanzó contra distintos dirigentes del PRO y de la UCR renovaron inquinas, multiplicaron desconfianzas y fundaron algunas vendettas en las latitudes más sensibles de la coalición opositora, el interbloque de Juntos por el Cambio en Diputados, que actualmente contiene diez bloques. De los cuatro más importantes hay tres que están en pie de guerra contra la fundadora de la Coalición Cívica. Los cuestionamientos contra "Lilita" y sus últimas declaraciones televisivas han sido casi unánimes, pero en la Cámara baja los protagonistas de la novela interna aseguran que la pelea no escalará. Si no aparece una convocatoria para sesionar este mes, el recinto recién volverá a debatir hasta que el jefe de Gabinete, Juan Manzur, se presente a brindar informes, el próximo 14 de septiembre.
Ese hiato en la agenda legislativa, que podría cambiar en las próximas semanas, les permitirá a las tribus de JxC evitar nuevos encontronazos en el corto plazo. No esta prevista ninguna reunión del interbloque y tampoco aparece en el horizonte una nueva reunión de la mesa nacional. Sin esas instancias orgánicas por delante, la interna con Carrió transcurrirá a cielo abierto y a través de los medios.
En cada tribu del espacio se preguntan si la chaqueña seguirá hablando en los próximos días, pero prefieren creer que luego del vendaval desatado guardará silencio y hará lo mismo su bloque de 11 bancas. Todos sus integrantes mantienen silencio de radio luego de acordar un comunicado donde advirtieron: "JxC puede pedirle a Carrió que se retire definitivamente de la política, y tal vez es lo que quiere. Si eso sucede, lo hará, pero no puede pedirle que le mienta a la sociedad". Pareció un amague de ruptura, pero en voz baja niegan esa chance.
El mensaje oscureció todavía más los ánimos internos. En algunos despachos del segundo piso del Palacio y del Anexo consideran que es "otro ataque de vanidad y cinismo". Lo único que mitiga la bronca que mascullan en cada bloque es el rechazo casi unánime. "Quedó sola y su bloque también, pero además quedan pegados a un internismo que les va a costar caro en las encuestas, como le pasó a (Martín) Lousteau cuando a fin de año promovió la división del bloque de la UCR", evaluó un legislador que la conoce desde hace años.
Las mayores sospechas internas no apuntan a quienes se pronunciaron, sino a los que guardaron silencio. En esa lista corta el mayor interrogante gira en torno al expresidente Mauricio Macri, que no dijo una sola palabra desde que "Lilita" comenzó su nuevo road show mediático. Los más desconfiados dentro del PRO y la UCR creen que detrás de la nueva ofensiva está el fundador del PRO. Otras fuentes del mismo espacio confiaron que también creyeron ver la influencia del alcalde Horacio Rodríguez Larreta. Carrió apuntó contra los amigos del extitular de la Cámara y flamante ministro de Economía, Sergio Massa. Le sacudió a los diputados Cristian Ritondo, Emilio Monzó y Rogelio Frigerio, pero también al gobernador jujeño Gerardo Morales. Al alcalde lo indultó. No negó la larga relación que lo une con el tigrense, pero dijo que no tiene negocios. Ese planteo aumentó la desconfianza hacia el jefe de Gobierno porteño. En el bloque amarillo dicen que uno de los más cuestionados por Carrió, como Ritondo, no ocultó sus interrogantes.
Otros habitantes de la alianza opositora también miran de reojo al exvicejefe porteño Diego Santilli. "Hace poco estuvo en la casa de Lilita (en Exaltación de la Cruz) pero hasta ahora ella no lo mencionó y eso que también tiene una muy buena relación con Massa. Hay algo raro ahí", sentenció un compañero de bancada del diputado que construye con empeño su candidatura a gobernador bajo el signo del larretismo bonaerense. La foto actual anticipa que el año que viene deberá medirse con Ritondo por la cabeza de lista del PRO en el mayor distrito electoral. Así como el "Colo" tiene toda la infraestructura del larretismo para esa aventura, el exministro de seguridad de María Eugenia Vidal exhibe el respaldo de Macri.
"Ayer a la mañana (por el martes) estuve dos horas con Mauricio", contestó Ritondo este miércoles en una entrevista al canal A24. Lo dijo para aplacar las sospechas sobre el rol de la mano del expresidente detrás de los últimos dardos de Carrió "No tiene que ver una cosa con la otra. Se muy claramente de lo que opina Macri", lanzó el titular del bloque del PRO. El magnate no dijo nada, pero en su entorno aseguran que no acuerda con la movida de Lilita. Salvo Ritondo, los demás afectados creen que es parte del "mismo cinismo de Lilita". En otros rincones del PRO sólo indican que hay que seguir de cerca el vínculo entre Carrió y Macri porque hace un mes casi no se hablaban.
Así como Ritondo cree que el exmandatario no está detrás de la furia de Lilita, también opina que ella es una mentirosa. "Carrio es muy toxica", lanzó en la misma entrevista y se preguntó: "¿Además de querer conseguir uno o dos diputados más, para quien juega? Nunca le contesté con los agravios y hay que decir basta. A mi me cansó. Se tiene que jubilar. Es una figura decorativa", completó el diputado oriundo del barrio de Mataderos. Comanda el bloque más grande de JxC, pero el interbloque no tiene presidente desde el año pasado. Dicen que es Lilita quien lo vetó argumentando las mismas razones que repartió en los medios. Hasta el año pasado el espacio fue conducido por el radical Mario Negri, amigo personal de Carrió. Tampoco dijo una palabra en pleno temporal.
Las acusaciones sólo cosecharon malos recuerdos sobre Carrió por parte de los señalados. Algunas fuentes acotan que estaba al tanto de todas las negociaciones que ahora cuestiona. Creen que busca tensar una negociación para el futuro, pero no le dan mucho crédito a la hipótesis de un rechazo por acuerdos distritales del PRO con la fuerza de ultraderecha que lidera el diputado Javier Milei, especialmente en la provincia de Buenos Aires, donde no hay segunda vuelta. Por el contrario, no dejan de ver hilos que conducen a Macri. El jefe del PRO calla y espera su momento. Mientras tanto en su entorno dirán que está "sorprendido" por las palabras de su exsocia fundadora de Cambiemos.