TODOS CONTRA TODOS

Massa y su calculadora: los próximos hits del Señor de los Alivios

Después de Ganancias, presentó un proyecto para monotributistas que apunta al electorado bonaerense. Qué sigue. Antón Pirulero con las banderas del FR.

Mientras espera que Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner retomen en algún momento su comunicación, Sergio Massa intenta sostener desde el Congreso las banderas que enarboló en el Frente Renovador, que tienen como destinataria a la clase media trabajadora, a profesionales y a las pequeñas y medianas empresas. Su electorado. En carpeta, hay otras ideas de "alivios".

 

Calculadora en mano, el titular de Diputados promovió en los últimos días la suba del mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias, a lo que sumó el proyecto de alivio fiscal para monotributistas y autónomos, que prevé adelantar al 1 de julio el ajuste para los máximos de facturación. 

 

En términos electorales, los números que respaldan el proyecto de Massa son contundentes para el Frente de Todos. De los 4,5 millones de monotributistas que se beneficiarían por la suba del máximo de las escalas, un 35% -casi 1,6 millones-  vive en la provincia de Buenos Aires, el bastión del oficialismo.

 

Tomado en términos del AMBA, la zona metropolitana que incluye la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense, el número asciende a 1,7 millones. Es el 39% de los monotributistas y autónomos, el universo al que pretende hablarle Massa.

 

“Las medidas impulsadas por este Gobierno han tenido siempre el objetivo de sostener la inclusión económica y social de los trabajadores, jubilados, pequeños comerciantes, artesanos, jóvenes profesionales y trabajadores sociales”, dice el proyecto que se presentó en la Cámara de Diputados.

 

El mismo texto hace referencia a la pulseada que hubo la semana pasada entre Massa y el Ministerio de Economía por la suba del piso de Ganancias. “Claro ejemplo de esto resultó la medida anunciada el pasado viernes referida a actualizar el 'piso' a partir del cual los trabajadores empiezan a pagar el impuesto a las ganancias, elevándolo a $ 280 mil mensuales. Sin embargo, entendemos que las medidas de alivio fiscal deben seguir ampliándose a otros sectores como ser los pequeños contribuyentes y los autónomos”, apunta.

 

El debate entre el presidente de la Cámara de Diputados y Martín Guzmán quedó saldado la semana pasada con el anuncio que ambos hicieron junto al secretario general de la CGT, Héctor Daer, en el que se confirmó la actualización del impuesto. Para Massa, fue una victoria política que le permitió volver a hablarle al electorado al que le apuntó históricamente desde su espacio, el Frente Renovador.

 

Ganancias fue una de las banderas con las que Massa ganó las elecciones 2013, cuando Cristina Fernández de Kirchner era presidenta. Por eso, desde el massismo destacan la “coherencia” del titular de la Cámara de Diputados en el sostenimiento de su prédica “el salario no es ganancia”. En pleno río revuelto del oficialismo, hay otros pescadores ganando. “Le sacamos la bandera a la oposición, que se queda con temas electorales y candidaturas. Nosotros nos ocupamos de la clase media y del crecimiento”, celebran cerca del líder del Frente Renovador. El nuevo piso de Ganancias beneficia a cerca de 400 mil contribuyentes en todo el país, de los cuales casi el 45% habita en la provincia de Buenos Aires.

 

Ahora, Massa evalúa otras propuestas que también apuntan a la clase media y a los sectores profesionales. Sobre su escritorio tiene un informe que prepararon sus equipos técnicos destinado a darle alguna solución en materia cambiaria a aquellos profesionales independientes que exportan servicios al exterior y que se ven perjudicados por el desdoblamiento interno.

 

Además, trabaja para los próximos días en la reactivación de la ley Régimen de Fomento al Desarrollo Agroindustrial Federal, Inclusivo, Sustentable y Exportador, que está congelada desde hace meses en el Congreso y que apunta a potenciar las exportaciones del sector.

 

Así, Massa busca ganar protagonismo desde el Congreso y posicionarse en la carrera electoral para 2023 con una agenda que apunta a la clase media, con el intento de plantar la bandera de un peronismo “más moderno” y pragmático, que se mueve por fuera de las disputas internas.

 

Javier Milei recibió a la cúpula de la Iglesia
Axel Kicillof, en la marcha del 24 de marzo.

También te puede interesar