Walter Rodríguez es el fiscal federal de instrucción número 2 de la ciudad de Santa Fe. En dialogo con Letra P cuenta cómo es investigar el delito de mayor impacto económico y político y los cortocircuitos con quienes están encargados de la prevención. Afirma que en la provincia de Santa Fe el consumo de drogas aumenta y se consolida el tráfico, mientras en las promesas de reforma y engrosamiento del sistema judicial se cuela la grieta.
-La forma de la Justicia Federal, y en particular la de Santa Fe, está en el centro de la escena política pero no termina de concretarse. ¿Qué lo frena?
-El proyecto de reforma que propone el Ejecutivo básicamente lo que hace es aumentar la cantidad de juzgados, de fiscalías y defensorías para que la estructura del Poder Judicial Federal en la provincia tenga un volumen más generoso para afrontar la cantidad de casos, que son crecientes. Y ahí se da una de las dificultades más notorias, tras su aprobación en el Senado no hubo acuerdo para ningún tipo de tratamiento en la Cámara de Diputados. Y este obstáculo político tiene un agregado: si ese proyecto avanza, la designación de un juez, un fiscal o un defensor oficial es un proceso que puede tardar más de dos años y medio; y luego volvemos otra vez al principio, todo pliego que avance necesita del acuerdo del Senado. A eso hay que agregarle la paralización del Consejo de la Magistratura.
-¿La política y la justicia van a destiempo en la Argentina?
-El ejemplo más concreto de lo difícil que es este recorrido, es que no se logra avanzar con la designación del Procurador de la Nación o con cubrir la quinta vacante de la Corte Suprema. Sin acuerdos políticos no va a ser posible que se ponga en marcha ningún tipo de iniciativa tendiente a fortalecer la justicia federal ni de la provincia de Santa Fe ni del resto del país.
-Hablamos de las demoras de la política, pero una de las críticas más fuertes al servicio de justicia en el país es que es lento.
-Sí, hay críticas acertadas, pero también hay algo en lo que recurrentemente de parte de quienes desempeñan cargos de gestión ejecutiva: atribuyen los problemas de seguridad al mal funcionamiento del sistema de justicia y creo que es un factor bastante menos trascendente. La Justicia no tiene la incidencia que algunos pretenden.
-¿Considera que hay una mayor falla en la prevención que en la justicia?
-Lo que más le inquieta a la comunidad son las muertes, y en ese sentido parecería que sí, porque muchos son hechos prevenibles, podrían haber sido impedidos con presencia de la fuerza de seguridad en el territorio.
-En la justicia provincial en Santa Fe sostienen que a las grandes bandas narcos, como la de Los Monos, las detuvieron y enjuiciaron ellos, cuando por el tipo de actividad delictiva correspondería al fuero federal. ¿Cómo se explican esos casos?
-Es un cuestionamiento que se le hace a la Justicia Federal de Rosario. Yo te puedo contestar por la jurisdicción donde yo trabajo y acá tuvimos casos importantísimos como el de Luis Paz, el excomisario Hugo Tognoli, Sergio Villarroel, Raúl Basimiani, un caso de lavado de activos como el de Vicente Pignata, solo por nombrar algunos. En un tiempo de tres o cuatro años los grandes narcos en Santa Fe perdieron. Lo que sí puedo decir de Rosario es que la Justicia Federal no tuvo el refuerzo de estructura que requería para la cantidad de casos.
-¿Cómo opera el narcotráfico en la provincia de Santa Fe?
-Rosario es un centro de consumo fuerte y lo mismo pasa -con otra escala por la cantidad de población - en la ciudad de Santa Fe; y después ya hay una realidad que es que no hay pueblo en la provincia donde no haya droga. Y por las características geográficas, lo que existe es mucho traslado y cruce de drogas. El gran déficit que tenemos es el control de la hidrovía. Ni siquiera tenemos casos que nos permitan dimensionar el tráfico que se produce ahí. Tenemos mucho más avanzado el control del tráfico aéreo, hubo un caso de un aterrizaje de una avioneta en Larrechea que nos llevó a encontrar 400 kilos de cocaína en Villa Gobernador Gálvez. Lo que todavía no se ve tanto en Santa Fe es la elaboración como para decir que tenemos producción local.