El Gobierno manifestó su "preocupación" por la situación generada en Ucrania a partir del apoyo de Rusia a los grupos separatistas de ese país y destacó "la necesidad de que todas las partes involucradas avancen en una negociación diplomática que permita una salida política" a la crisis.
Para la administración de Alberto Fernández, el tema no es fácil ya que involucra a uno de los mayores socios políticos y comerciales del oficialismo, Vladimir Putin y porque, además, el conflicto se da en medio de las negociaciones por la reestructuración de la deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI), en la cual Estados Unidos tiene una gran incidencia.
A través de un comunicado, Cancillería condenó el uso de la fuerza e instó a los países involucrados a "resolver sus diferencias a través del diálogo".
"La República Argentina expresa su preocupación por el desarrollo de la situación generada en Ucrania", reafirma el texto oficial
En esa sintonía, desde la Casa Rosada reafirmaron "la necesidad de que las partes involucradas avancen en una negociación diplomática que permita una salida política a la creciente tensión en el este de Ucrania, a fin de mantener la paz y la seguridad internacionales".
La postura oficial hace hincapié en la decisión política de no utilizar la fuerza para resolver el conflicto y, en cambio, llama a resolver las diferencias a través del diálogo, "con apego a los principios de la Carta de las Naciones Unidas (ONU) y el derecho Internacional".