El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, cuestionó la gestión en Rosario y el intendente Pablo Javkin no dudó en salir al cruce. En una entrevista radial, el alcalde de la capital habló de la seguridad en esta ciudad y se preguntó si alguien “la elegiría para vivir”. Si bien tienen buenas migas, la respuesta desde la Cuna de la Bandera no tardó en llegar. Un cruce inesperado.
“En Rosario se ocuparon -no lo voy a cuestionar- de la salud y se olvidaron de la seguridad. Mirá lo que es, tenés la tasa de delito más alta de la historia. Como gobierno yo podría decir: ‘No hago nada más y pongo toda la plata en salud’. Mirá lo que es la seguridad en Rosario, ¿vos elegís Rosario como ciudad?”, argumentó Larreta en diálogo con Radio Con Vos.
Rápidamente el intendente Javkin replicó una nota del diario La Nación en su cuenta oficial de Twitter y le respondió: “Nací en Rosario, la elegí y acá me quedo, orgulloso. Sí, necesitamos ayuda para erradicar a las mafias porque como lo hablamos y bien sabés, @horaciorlarreta, la seguridad no es competencia municipal. Espero contar con vos y con todos. Esta pelea es de Rosario y del país”.
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Larreta formuló sus críticas una semana después de que su archirrival en la interna de JxC, Patricia Bullrich, arme en Rosario un plenario con alrededor de 700 cuadros técnicos en plan presentación de equipo de gobierno, en el que hizo especial énfasis en la problemática de la violencia vinculada al narcotráfico que padece esa ciudad.
Como viene contando Letra P, hace tiempo que el jefe de gobierno porteño busca sellar un acuerdo con el rosarino, quien, desde su victoria en 2019, entró en el radar del círculo chico larretista. Muestra de esa buena sintonía, que tiene réplicas subterráneas entre ambas gestiones, se vio a fines de julio cuando el jefe de gobierno porteño llevó a Rosario el encuentro Camino Federal previo a la Cumbre C40. Allí, Larreta y Javkin compartieron escenario y, también, un café a solas.
Con un pie y medio en el Frente de Frentes, el rosarino pretende una caolición amplia del arco no peronista pero con anclaje local. Es decir, sin el sello de Juntos por el Cambio. Aunque, de todas maneras, sintoniza con Larreta en cuestiones de gestión. Habrá que ver si este inesperado cruce genera cortocircuitos.