El ingreso al tramo más crítico de la renegociación con el FMI cambió los tiempos legislativos del oficialismo para este verano. Las diputadas y los diputados del Frente de Todos (FdT) se preparan para que el presidente Alberto Fernández convoque a un período de sesiones extraordinarias a partir de febrero, pero consideran que el anunciado plan plurianual no será parte del temario. En su lugar, tendrán cinco semanas para avanzar con una serie de iniciativas económicas enviadas por el Ejecutivo y el posible tratamiento en comisiones de la nueva composición del Consejo de la Magistratura, para cumplir con el fallo de la Corte Suprema de Justicia que invalidó su esquema actual de funcionamiento.
En el bloque del Frente de Todos, que conducen Máximo Kirchner y Cecilia Moreau, ya no aguardan que el Ejecutivo mande el plan plurianual que Fernández anunció en la tarde del 14 de noviembre, cuando cerraron las urnas. Por entonces habló de enviarlo en la primera semana de diciembre. Un mes después de ese plazo difuso en el oficialismo admiten que la iniciativa se está reconvirtiendo en el envío del eventual acuerdo con el FMI. Estiman que no tiene sentido incluir en extraordinarias un proyecto de ley "cuya cuestión de fondo no ha sido saldada" y está en pleno desarrollo, como es la negociación con el organismo financiero.
Esas previsiones también las barajan en el Palacio de Hacienda. Si se confirma el temario de extraordinarias y no aparece ninguna iniciativa vinculada al endeudamiento soberano con el FMI, el debate se concretará después del 1° de marzo, cuando comience el período de sesiones ordinarias. El cambio en los tiempos implica que el eventual tratamiento legislativo se concretaría en el filo de los próximos vencimientos de febrero y marzo con el Fondo y configuran la "dead line" que admiten en el Gobierno.
"El plan plurianual es la negociación con el Fondo. El Presidente puede ampliar el temario de extraordinarias en cualquier momento y con otro decreto. Sino pasa a ordinarias, pero si se cierra el acuerdo en las próximas semanas se puede incluir en el temario", explicó a Letra P el diputado nacional Marcelo Cassaretto, secretario de la Comisión de Presupuesto y Hacienda.
En otros bloques aliados al oficialismo tampoco esperan el plan plurianual, sino el ingreso de un proyecto redactado por el Ejecutivo para establecer un Presupuesto 2022 enfocado a ordenar el financiamiento y programación de las obras públicas que quedaron a tiro de decreto luego del naufragio del plan de cuentas nacionales para este año.
Según estiman en el FdT, el temario confirmado incluye retomar una parte de los proyectos que presentó Fernández luego de analizarlos con el Consejo Económico y Social. El primero es la nueva Ley de Hidrocarburos que está en el Senado y quedó empantanado en las negociaciones con los representantes de las provincias petroleras que reclaman mayores beneficios para apoyar la iniciativa.
Otro es la reforma de la ley de Compre Argentino, que rige desde 2017, durante la gestión de Cambiemos, e incluye una serie de cambios que buscan mejorar las preferencias de compra para pymes nacionales y sectores estratégicos. A ese punto se suman la nueva ley de Desarrollo Agrobioindustrial, que el ministro Julián Dominguez iba a presentar a fin de año y postergó el lanzamiento. Lo mismo sucede con la ley de Electromovilidad que posiblemente formaría parte de los temas a tratar, aunque el oficialismo carga con una treintena de textos que van perdiendo estado parlamentario y todavía no tienen definición de avance, como la ley de humedales, que ya lo perdió.
También aguardan que el Ejecutivo habilite las próximas semanas previas a marzo para tratar la nueva ley de cáñamo industrial y medicinal, aunque el año pasado el Ejecutivo habilitó un ambicioso temario que fue escasamente cumplido.