Un portazo de Juntos por el Cambio (JxC) fue la señal de largada de la ofensiva que lanzó este viernes el oficialismo para intentar la aprobación del proyecto de reforma del Ministerio Público Fiscal (MPF) que tiene como objetivo inmediato la remoción del Procurador General de la Nación interno Eduardo Casal. Los representantes opositores se desconectaron del plenario de las comisiones de Justicia y Asuntos Constitucionales de la Cámara de Diputados, convocado para escuchar la exposición de cuatro expertos. Fue el preludio de un trámite que la semana próxima podría concluir con un dictamen de mayoría para la iniciativa. El impulso, dicen en el oficialismo, estaría acompañado de los votos necesarios para que la iniciativa que ya fue aprobada por el Senado, sea transformada en ley por la Cámara baja.
Es la misma información que manejan en el interbloque de JxC. Poco después de las 16, cuando arrancó el plenario, el vicepresidente de la comisión de Justicia, Gustavo Menna (UCR), fue el encargado de expresar ese temor en forma de portazo. Hizo uso de su oratoria y cargó contra el encuentro. "No vamos a participar de esta reunión escuchando a los académicos como si no pasara nada. El interbloque de Juntos por el Cambio se va a retirar. No vamos a convalidar esta farsa", dijo el diputado chubutense en forma remota luego de acusar al oficialismo de reactivar ese plenario de comisiones como una forma de disfrazar la intención de fondo: sacar a Casal, que está en el cargo y enfrenta una serie de acusaciones en su contra presentadas en la Comisión Bicameral de Seguimiento del Ministerio Público Fiscal. Una de ellas pide investigarlo por enriquecimiento ilícito, rubricada por el titular de la comisión de Justicia, Rodolfo Tailhade, que condujo el encuentro junto a su par de Asuntos Constitucionales, Hernán Pérez Araujo.
“Esta reunión es una farsa para darle un barniz de legalidad al tratamiento de este proyecto de ley que busca lograr la impunidad judicial y avasallar el MPF lo que es de una gravedad institucional inmensa”, disparó Menna poco antes de que todos los miembros de JxC en la comisión se desconectaran y no escucharan a los cuatro invitados. No toda la oposición se fue: participaron la diputada Graciela Camaño, del bloque Consenso Federal, y el titular del interbloque de Unidad y Equidad para el Desarrollo, José Luis Ramón. El 26 de abril los escuderos de JxC hicieron algo parecido: no se loguearon al plenario y desconocieron la visita virtual del flamante ministro de Justicia, Martín Soria, que defendió el proyecto pero enumeró una serie de cambios posibles para sumar votos. Su misión, tal como contó este portal, es destrabar la sanción de la reforma de la Procuración y la ampliación de juzgados federales en todo el país a través de una reforma judicial. Ambas fueron aprobadas en el Senado y hasta el mes pasado estaban frenadas.
A principios de mayo, los cálculos del oficialismo seguían clavados en una suma perdidosa: 122 voluntades a favor, 127 en contra y seis indecisos. La balanza comenzó a cambiar este jueves, durante la reunión que mantuvo Soria con el diputado mendocino Ramón, que preside un interbloque que concentra seis votos. Fuentes cercanas a ese espacio confiaron a Letra P que el ministro aceptó sus pedidos: que se contemple la representación de la Federación Argentina de Colegios de Abogados (FACA) en los jurados para fiscales del fuero federal que tendrá el Tribunal de Enjuiciamiento de magistrados del MPF y la creación de una Procuraduría de Defensa de Consumidores y Usuarios.
La iniciativa para cambiar la ley orgánica del MPF tiene además como puntos centrales cambiar el requisito de designarlo en el Senado por dos tercios de los presentes, y hacerlo por mayoría absoluta. Actualmente requiere 48 votos y la iniciativa propone que sea con 37. También busca establecer un plazo de cinco años al mandato del futuro jefe de los fiscales y que solo pueda ser removido por “razones de mal desempeño, crímenes comunes o delito en el ejercicio de sus funciones”. También establece que los traslados de magistrados y empleados del organismo sean aprobados por la bicameral de Seguimiento que, si prospera el texto, podrá nombrar a un procurador en caso de vacancia o licencia que supere los 30 días.
Ese punto es la pieza que permitiría nombrar a un nuevo procurador interino si Casal es removido por la Bicameral de Seguimiento del MPF a partir de las denuncias que tiene en su contra. El presidente Alberto Fernández envió al Senado el pliego del juez federal Daniel Rafecas, pero no reúne los dos tercios necesarios en una cámara donde su titular, Cristina Fernández de Kirchner, no frena el trámite pero tampoco lo milita. Ante esa situación, si Casal es removido podría ser suplantado por el actual procurador ante la Corte Víctor Abramovich. Ahí radica el eje de las resistencias de JxC. Mario Negri, el titular de ese interbloque opositor, fue concreto: "El kirchnerismo apura una ley perversa para controlar el MPF. Designan un nuevo Procurador con la mayoría peronista del Senado y/o nombran un interino con su mayoría en la Bicameral. Ponen a todos los fiscales a tiro de destitución modificando el Jury".
El oficialismo tiene 117 votos propios y necesita sumar otros doce para tener quórum. Desde el jueves sumó a los seis del interbloque de Ramón y elevó la cifra a 123. Hay cinco votos indefinidos que elevarían la suma a 128. Es el caso de dos integrantes del interbloque lavagnista: Eduardo Bucca y Andrés Zottos, del bloque Justicialista, y los dos miembros del bloque Acción Federal, que integró JxC hasta el año pasado y desde entonces definió su independencia luego de votar el Presupuesto 2021. Se trata de los diputados Antonio Carambia y Felipe Álvarez, que el año pasado participó en forma virtual de la presentación de los dos proyectos que encabezó el Presidente. La quinta pieza es Alma Sapag, del Movimiento Popular Neuquino (MPN), que hasta hace un mes era contabilizada como un voto a favor. Si esas voluntades respaldan el proyecto, el Frente de Todos estaría a un voto de llegar a los 129.
En el conglomerado oficialista, que preside Máximo Kirchner, sostienen que el encargado de juntar los votos es el titular del cuerpo, Sergio Massa. Dentro del espacio aseguran que tienen los votos y quizás por eso los representantes de JxC eligieron conectarse un segundo antes de partir y amplificar el portazo para redoblar su campaña en los medios. En Diputados la batalla legislativa que se avecina apunta a un posible dictamen la semana próxima para pasar al recinto en dos o tres semanas.