Con la vacunación en marcha y el regreso de las clases presenciales como contexto, la dirigencia de fútbol, encabezada por Claudio Tapia, intensificó las gestiones para avanzar hacia un regreso progresivo del púbico a los estadios argentinos. La semana pasada, además, Gonzalo Belloso, secretario general adjunto de la Conmebol, habló de la aspiración de esa entidad de que la Copa América tenga simpatizantes en las tribunas. Días después, el vicejefe de Gobierno porteño, Diego Santilli, visitó la AFA para coordinar el regreso de las hinchadas en la Ciudad, al tiempo que otros deportes y distritos también trabajan en el mismo sentido. ¿De qué y de quiénes depende la nueva normalidad futbolera?
El año pasado, una vez resuelto el retorno a los entrenamientos, el fútbol comenzó a machacar sobre la posibilidad de abrir los estadios, aunque la respuesta desde el Estado siempre fue la misma: que había que esperar. A diferencia del resto de las actividades, en las que los gobiernos municipales y provinciales pueden definir criterios, el fútbol siempre depende de la Nación. El ministro de Turismo y Deporte, Matías Lammens, siempre se mostró cauteloso cuando le consultaban primero por el inicio de los entrenamientos y ahora por la vuelta de las hinchadas. Sus voceros recalcan que, pese a la reunión con Santilli, nadie de la AFA se comunicó con él a pesar de que fue presidente y actualmente es vicepresidente segundo de San Lorenzo y Marcelo Tinelli fue uno de los asistentes al cónclave. En última instancia, son las autoridades sanitarias nacionales quienes definirán y Lammens tiene pendiente una reunión con Carla Vizzotti que fue pospuesta luego de que la ministra contrajera el virus del Sars-CoV-2.
El ministro, que esta semana presentó un plan para hacer un relevamiento de la totalidad de clubes que hay en el país, no quiere que le marquen la agenda y por eso impone cautela. El gobierno nacional aspira a que haya hinchas en los cinco estadios donde habrá partidos en la Copa América, que arranca el 11 de junio, y no descarta alguna prueba previa. Belloso, exdelantero de Rosario Central y uno de los dirigentes más importantes de la Conmebol, declaró en Radio La Red que la intención es que haya al menos un 30% de ocupación y fuentes de la AFA confirmaron a Letra P: “Si llegamos con público a junio, también lo habrá en la Copa América”.
Colombia, que organiza el torneo con Argentina, garantizó esta semana que habrá hinchas según lo dicho por su ministro de Deportes, Ernesto Lucena, que afirmó que "una Copa América sin público realmente no tendría sentido". "Estamos ya trabajando en el protocolo de bioseguridad para tener un aforo aproximado del 30%”, agregó. Así, contradijo al secretario de Gobierno de Bogotá, Luis Ernesto Gómez. “Tenemos que prepararnos para que los partidos sean sin público”, había advertido.
Mendoza, Córdoba, la ciudad y la provincia de Buenos Aires y Santiago del Estero son las sedes donde se jugará el torneo y, junto a Tucumán, Santa Fe y Entre Ríos, los distritos que tienen equipos en Primera División del fútbol masculino. El año pasado, la AFA envió una carta de intención a estos gobernadores para que les habilitaran un 33% de aforo en los estadios. En Viamonte confirman que hay diálogo fluido con todos los ejecutivos, pero que todavía no se puede garantizar una fecha. A principios de febrero, Tapia intentó instalar el tema nuevamente, pero el Gobierno porteño lo había rechazado, aunque semanas después se dio la reunión con Santilli, de la que participaron dirigentes de los clubes porteños como Tinelli, Ricardo Rosica, secretario general de Boca, y Rodolfo D´Onofrio, que en una entrevista con Perfil puso en suspenso la posibilidad de ser candidato en las elecciones legislativas. El presidente de River también reconoció que su club es uno de los que presiona por la apertura ya que suele vender los abonos anuales para ingresar al estadio Monumental.
Con la firma de Gustavo Gesualdo, secretario de Desarrollo Ciudadano, el 27 de noviembre se aprobó el protocolo para el desarrollo de actividades deportivas con público en la Ciudad para todas las disciplinas, salvo el fútbol, que requiere “previa intervención y análisis de la Subsecretaría de Seguridad Ciudadana y del Comité de Seguridad en el Fútbol de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”. Aun si la Ciudad habilitase, como dijo Santilli luego de la reunión, la última palabra es de la Nación.
El primer deporte con personas en las tribunas fue el automovilismo en diciembre, cuando el Super TC2000 corrió la sexta fecha en el autódromo Oscar y Juan Gálvez de la Ciudad de Buenos Aires. En ese momento, se permitió el ingreso de hasta 500 personas. La medida sentó un precedente que se repitió este año en las dos últimas carreras que consagraron a Matías Rossi como campeón. Lo mismo ocurrirá con el Turismo Carretera, que este fin de semana tendrá público en el circuito porteño y, si bien hay venta de entradas, por una cuestión de confidencialidad no hay datos precisos de cuantas se expidieron.
El TC fue la primera actividad absoluta en volver a competir en septiembre pasado, cuando se corrió en San Nicolás, ciudad de Ginés González García, que ayudó en la habilitación, y que casi con seguridad será la sede de la tercera fecha, el 28 de marzo. Hasta la sexta fecha seguirán en terreno bonaerense y la idea es correr en otras provincias, como fue el caso de San Juan, que recibió la definición de la Copa de Oro de 2020 y fue la única, fuera de la Capital Federal y Buenos Aires, donde hubo fecha del TC desde el inicio de la pandemia. La Asociación de Corredores de Turismo Carretera, que organiza la carrera, y el gobierno provincial están en tratativas para permitir el ingreso de público y para ello el ministro de salud bonaerense, Daniel Gollán, reacio el año pasado a habilitar la categoría, estuvo presente el 21 de febrero en el debut del calendario en el Roberto Mouras de La Plata.
Lo acompañaron el excorredor y diputado provincial del Frente de Todos Marcos Di Palma y el subsecretario de Deportes, Javier Lovera, que además preside la Comisión Provincial de Automovilismo y Motociclismo Deportivo (COPAM). “Estamos trabajando con el Ministerio de Salud en una estrategia de reapertura de las actividades. El regreso del público a los eventos deportivos dependerá del impacto de la vacunación. En cuanto tengamos una ventana que nos permita incorporar aforo dentro de las actividades deportivas, lo vamos a hacer”, sentenció Lovera, que también es médico.
Además del fútbol y la Copa América, Córdoba dio la nota con la presencia de espectadores en el ATP que se jugó a fines de febrero en las instalaciones del Mario Alberto Kempes de la capital provincial. Si bien no hubo venta de entradas, se permitió el ingreso de hasta 500 personas que incluyeron familiares de los tenistas, personal de la organización, sponsors y prensa. La Agencia Córdoba Deportes, que preside Héctor “Pichi” Campana, ex jugador de básquet y ex vicegobernador, llegó a ese acuerdo con la empresa Torneos que organiza el Córdoba Open desde 2019 y está en diálogo permanente con otras federaciones ante potenciales habilitaciones.
Además, el fin de semana se juega el Argentina Open en Palermo, el otro gran torneo de tenis que se hace en el país, con asistentes en las tribunas.
Los ritmos de vacunación y de contagio son los ejes que irán determinando las potenciales aperturas para que haya espectadores en los estadios, sobre todo descubiertos, aunque el principal objetivo sea el fútbol con el torneo de Primera y la Copa América, donde una de las sedes serán el Madre de Ciudades de Santiago del Estero, que inauguró Alberto Fernández esta semana junto a Gerardo Zamora y costó $ 1.500 millones de dinero público.