Una interna partidaria provincial con participación récord de afiliados –alrededor de 120 mil– y un planteo de disputa interna en las primarias que posicionó a una figura de proyección nacional. Esos dos hitos se repiten como un mantra en las voces bonaerenses del radicalismo que ven a 2021 como el punto de partida de una construcción que buscará liderar la propuesta del frente opositor en 2023.
Además de eso, en el Comité Provincia que preside Maximiliano Abad ponderan el emplazamiento de la nueva sede partidaria en la capital bonaerense, con un perfil “moderno” acorde a “un partido muy dinámico”, con espacios de usos múltiples, oficinas y salas de reuniones. Para el próximo año, prevén la segunda planta del Comité, donde tendrá un lugar la JR. Pondrán un fuerte acento en la comunicación digital, con proyecciones de streaming y canal de Youtube propio. A los fines de recaudar fondos para ese cometido, realizaron días atrás una cena con 700 dirigentes en la que Abad enfatizó la construcción de “un radicalismo moderno, dinámico, de poder, que sueña nuevamente con ser gobierno”.
Más allá del foco en la “modernización” que contrasta con la vieja casona que ofició de sede durante la conducción de Daniel Salvador, la diferencia con respecto a aquella etapa también se relaciona con la actividad política que pasa por los pasillos del nuevo comité, que en los últimos meses ofició de centro de referencia para el desembarco de dirigentes del partido y de socios dentro de alianza.
También es punto de encuentro para fortalecer lazos con diversos pilares de la estructura dirigencial: desde reuniones con exintendentes, pasando por encuentros de legisladoras, hasta capacitaciones en diversas áreas para quienes ingresaron días atrás a la Legislatura. Además, la estrategia presupuestaria ha sido tema de abordaje junto con jefes comunales que pasaron por la nueva sede de calle 51. La ganancia este año dentro del palacio legislativo es otro punto que destacan: de las diez bancas que ponían en juego (cinco en Diputados y cinco en el Senado), la UCR creció a 13 (sostuvo su volumen en la Cámara Alta y sumó tres en la Cámara baja).
Los vendavales que llevaron a Evolución a romper el bloque radical en el Congreso no llegaron al ámbito bonaerense. Y eso también es resaltado en los pasillos del Comité Provincia. En efecto, Pablo Domenichini, referente bonaerense del espacio liderado por Martín Lousteau, resaltó a Letra P que en la UCR bonaerense “se está haciendo un buen trabajo”.
En tiempos de campaña, pasó por el comité el cabeza de la lista de aspirantes al Congreso de Juntos, Diego Santilli. Más tarde, también se reunieron con Abad referentes amarillos como Martiniano Molina y el intendente de Lanús, Néstor Grindetti. En la mesa radical destacan un clima de “mutuo respeto” con el PRO, pero aclaran que las primarias de este año pusieron a ambas fuerzas “en igualdad de condiciones” con miras a 2023.
Precisamente con ese año en la mira, para 2022 uno de los objetivos trazados en el radicalismo provincial es empezar a moldear los futuros candidatos en los 135 distritos, preparando desde los equipos de gestión hasta las herramientas relativas al posicionamiento de imagen, algo en lo que cuentan con un trabajo de especialistas en la materia. En ese tren, también analizan la posibilidad de construir una figura propia para la carrera a la gobernación, acompañando una eventual candidatura presidencial de Manes.
En lo territorial, está en agenda sostener los desembarcos distritales de la plana mayor partidaria, con una reunión de convención provincial en agenda para el primer semestre del año. Dentro de los temas a abordar en ese organismo presidido por el exdiputado nacional Carlos Fernández está previsto una reforma de la carta orgánica partidaria, ya votada en convenciones previas.