No es batacazo, pero el Gobierno se arrimó y quedó a un paso de empardar la madre de todas las batallas. Según los datos oficiales del escrutinio provisorio de las elecciones legislativas celebradas este domingo, la lista de aspirantes a la Cámara de Diputados por la alianza Juntos se imponía sobre la del Frente de Todos por menos de un punto y medio en la provincia de Buenos Aires.
Con el 97% de los votos escrutados, la alianza opositora cosechaba el 39,84%, contra el 38,52% de la coalición peronista.
Con estos guarismos, la segunda vuelta de este turno electoral modificaba notoriamente el escenario de las PASO. El 12 de septiembre, Juntos sumó 3.262.253 (37,33% del total) entre las dos listas que compitieron en la interna de la alianza (la encabezada por el exvicejefe de Gobierno porteño Diego Santilli y la que lideró el neurocirujano Facundo Manes). De esa manera, obtuvo 356.533 votos más que el Frente de Todos: la boleta encabezada por Victoria Tolosa Paz cosechó 2.905.720 adhesiones (33,25%).
En tercer lugar se ubicaba José Luis Espert, de Avanza Libertad, con 7,5%; en el cuarto aparecía el Frente de Izquierda, encabezado por Nicolás del Caño, que cosechaba 6,82%; quinto se ubicaba Florencio Randazzo, de Vamos con Vos, con 4,37, y cerraba la grilla Cyntia Hotton, de Más Valores, con 2,94%.
Las primeras lecturas del fuerte recorte de la distancia que había separado al Frente de Todos de la alianza Juntos en las PASO encontraban una posible explicación en el mayor protagonismo de los intendentes del conurbano -con la consecuente movilización de la maquinaria de poder territorial- en la campaña bonaerense del oficialismo, con la contracara de cierto relajamiento del aparato del combo opositor.
En esa explicación aparece la mano de la vicepresidenta Cristina Fernández y de su hijo, el diputado Máximo Kirchner, que promovieron, en sintonía con Martín Insaurralde, el cacique de Lomas de Zamora, la entrada de la tropa intendendista con la esperanza de revertir -al menos, amortiguar- la caída de las PASO, que produjo fuertes ciombronazos en la coalición peronista.
15 a 15
Si el escrutinio definitivo confirma el provisorio, el Frente de Todos y Juntos se quedarán, en partes iguales, con 30 de las 35 bancas que la provincia de Buenos Aires renueva en la Cámara baja.
En tanto, la fuerza liderada por Espert se quedaría con tres escaños y el Frente de Izquierda, con dos.