El macrismo santafesino comenzó a apropiarse de la agenda de la inseguridad en Rosario para empezar a guionar su campaña electoral y pegarle al gobernador Omar Perotti en el costado más flaco de su gestión y también a su ministro favorito, Marcelo Sain. Una liberación express de un delincuente tras una persecución cinematográfica fue el episodio que Juntos por el Cambio (JxC) tomó para conectar con la reacción ciudadana y utilizar de combustible para su línea discursiva.
JxC empuña el derrotero del socialismo en la materia y también de la gestión de Perotti que, al aumento de delitos menores como los arrebatos le suma un incremento de las cifras de homicidios. Con estos datos sobre la mesa, intenta marcar un contraste con la gestión de seguridad del gobierno de Mauricio Macri, la cual entienden que pueden presentar como un logro tangible.
De esa manera se hacen un espacio para plantear una dicotomía, ‘delincuentes vs ciudadanos’, que consigue estimular a una parte de la sociedad que no está decidida a escuchar otro abordaje más amplio. No tiene inconvenientes en desplegar ese tipo lógicas a diferencia de Perotti que, si bien prometió en su campaña "La paz y el orden", no ha llegado a imponer ese tono, sino que apuesta a una reforma estructural de la policía.
Pero para cerrar el postulado macrista, requieren de ciertos episodios que sirvan de modelo de aquella dicotomía, como en algún momento lo fue el recordado caso del policía Luis Chocobar que mató a un delincuente por la espalda luego de un asalto.
En busca de un Chocobar
Rosario le sirvió en bandeja un caso que rápidamente despertó la artillería de JxC versión 2021 para cuestionar la falta de seguridad, resaltar el compromiso policial y criticar la aplicación liviana de la justicia, otro de los temas de la botonera macrista.
La decisión de la Justicia de liberar en menos de 24 horas a un joven de 23 años que robó un celular en el centro y escapó de la policía con su moto durante más de 40 cuadras, en una fuga temeraria y de película que quedó filmada, generó todo tipo de reacciones.
Sobre todo porque después de poner en riesgo la vida de peatones y conductores, se lo vio salir de la comisaría con la moto en mano, y se ufanó de "la hazaña" en Facebook. La reacción de más peso fue la de Sain, quien desde Twitter cuestionó al fiscal. Horas después, el joven volvió a ser detenido.
El diputado nacional por JxC y armador santafesino, Federico Angelini, fue uno de los que rápidamente cuestionó en redes el caso junto al resto de los dirigentes santafesinos. “Es la cabal demostración que hay una serie de factores que permiten que esto suceda. La falta de seguridad que permite el arrebato, y también parte de la Justicia que vive en una realidad paralela a la de los ciudadanos”, dijo a Letra P.
El diputado provincial Gabriel Chumpitaz tensó más la cuerda con el viejo slogan de la puerta giratoria: “Llegamos al hartazgo por la inoperancia judicial y por la liberación sistemática de delincuentes que entran por una puerta y salen por la otra”. Al mismo momento explotaba en las redes sociales el video y la discusión por la venia de los policías bonaerenses ante la exministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien es la encargada de repartir el manual de estilo de la seguridad.
“Es un tema que lo impone la realidad, lamentablemente, estará en el debate (electoral)”, sostuvo Angelini. Para demostrar que la bandera a cuadros ya largó, presentarán en la Cámara de Diputados un pedido de interpelación contra el ministro de Seguridad. “Ya llevamos más de un año de gobierno de Perotti y no tenemos ni paz ni orden como se prometió. Queremos preguntarle al ministro cuál es su programa de gestión”, sostiene un comunicado de JxC.