El diputado nacional Federico Angelini pasa el verano con un pie en Rosario y otro en Buenos Aires. El comienzo de año lo tiene en la cocina de un frente amplio santafesino no peronista que ya se lanzó, pero que todavía se negocia. A su vez, con los preceptos del macrismo más duros en mano, agita la polarización que evidencia la voracidad con la que se manejará Juntos por el Cambio en el año electoral.
Le escapó a la playa, pero se mantiene activo en los medios, incluso en los canales de noticias nacionales. En Santa Fe diseña la “territorialidad” para “retomar la esencia de Juntos por el Cambio”, una suerte de remake de los timbreos. Visita vecindades y retuitea todas las actividades de los dirigentes rosarinos del PRO para no perder presencia. Dice que debe mantener activa a las bases aunque, por ahora, se demora la definición del comando central y hasta el manual discursivo. Sin embargo, adelanta una línea: toda la artillería, contra el kirchnerismo.
De ahí la insistencia de JxC para desarmar el Frente Progresista santafesino y crear un espacio nuevo que se pare de un lado de la grieta. En las últimas semanas, Angelini se abocó, junto a los radicales que ya dieron el salto, a darle las puntadas finales al anuncio del frente amplio no peronista que ahora espera la decisión del socialismo de cambiar un frente por otro.
Principalmente, pretenden que el exgobernador Miguel Lifschitz se sume con su potencial electoral, algo que, por ahora, ven complicado más allá de los ofrecimientos y roscas. “El socialismo tiene que tomar la decisión interna de cómo quiere posicionarse ante la sociedad, si se suma o no a ponerle un freno al kirchnerismo. Este frente quiere ser una opción para 2023 en Santa Fe”, apuró el diputado ante Letra P.
Juntos por cambiar
A nivel nacional, la alianza entre radicales, Coalición Cívica y el PRO evidenció durante 2020 una atomización donde cada referente atiende su juego y ocasionalmente se muestran juntos. Angelini, que es vicepresidente del PRO detrás de Patricia Bullrich, entiende que esa autonomía que se extiende durante el verano quedará surcada por la unidad.
Para completar la idea lanza una frase que bien podría salir de la boca de un peronista: “La unidad está sobre todas las cosas”. Esa coincidencia discursiva del “unidos triunfaremos” tiene su explicación en la polarización que promueven desde Cambiemos y que, como se contó, ya se engendra en Santa Fe con el frente amplio.
“Debido al regreso del kirchnerismo que hizo retroceder en la discusión de la Argentina, debemos entender que los límites de algunos acuerdos electorales tienen que ser más amplios y hay que mantener la unidad, porque esto es república o barbarie de nuevo”, lanza en lo que parece ser el primer speech macrista 2021.
De manual
Cuando no está en su rol de armador santafesino, se convierte en resonancia de los temas de la agenda macrista a nivel nacional: fórmula previsional, apoyo al campo, libertad, no al toque de queda, vacunas, cuarentena, reforma judicial, entre otros que dan combustible a la confrontación.
Al igual que hizo Mauricio Macri para reaparecer en el verano, esta semana volvió a empuñar la cruzada contra la falta de clases presenciales en las escuelas y promovió en enero un programa de apoyo escolar en distintos barrios de Rosario.