Sergio Massa se mueve como un ministro. Recorre distritos, lo que no era usual en un presidente de la Cámara de Diputados. Poseedor de una parte del Frente de Todos, el tigrense se para sobre el Frente Renovador, la plataforma que construyó en 2013, para imaginar su futuro. La iniciativa del dirigente de Gualeguaychú Enrique Ghiglione Bocalandro de abrir un local partidario fue propicia para darle a la jornada un aire refundacional. Contó con la participación del propio Massa. En un video, desde Buenos Aires, llamó a apostar al Frente de Todos con una fórmula que viene repitiendo en reiteradas oportunidades: “La unidad en la diversidad”. En la comarca entrerriana lo saludaron la vicegobernadora Laura Stratta, el director del Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (Enohsa), Enrique Cresto; el intendente de Paraná, Adán Bahl; el intendente anfitrión, Martín Piaggio, y el ministro de la Producción, Juan José Bahillo. Los cuatro hombres y la mujer integran la grilla de aspirantes a suceder al gobernador Gustavo Bordet en 2023.
En 20015, cuando era una fuerza opositora, el Frente Renovador tuvo un candidato a gobernador. Constituyeron la fórmula el entonces intendente de Villaguay, Adrián Fuertes, ahora senador provincial; y el exgobernador Jorge Busti. Esa elección dejó a Massa en tercer lugar en Entre Ríos con el 16 por ciento de los votos, lo que le permitió meter en la Legislatura provincial un senador y cuatro diputados.
Una vez asumido Bordet, los renovadores de entonces acompañaron a los bloques oficialistas. Antes del ballotage entre Mauricio Macri y Daniel Scioli, Fuertes pidió el voto por el peronista. Enseguida asumió como ministro de Turismo. La anécdota cuenta que, en la primera reunión de gabinete, ingresó un poco más tarde y, con la gracia que lo caracteriza, señaló a sus pares endilgándoles que estaban sentados allí gracias a él. Bordet se había impuesto ante Alfredo De Angeli por apenas un punto y medio. De no haber existido la propuesta del Frente Renovador para dividir el electorado opositor, el ruralista quizás se hubiera quedado con el sillón de Urquiza.
Durante el gobierno de Macri y la primera gestión de Bordet, el Frente Renovador quedó reducido en Entre Ríos a la figura de Massa. El tigrense pateaba el córner y cabeceaba. En la actualidad es un poco así, pero desde su nuevo rol en el oficialismo nacional se maneja con más holgura, contaron a Letra P en la Casa Gris.
La relación con el gobernador se remite a 2016, cuando cada uno decidió hacer una oposición “constructiuva” al gobierno nacional acompañando las principales leyes. Al año siguiente, en las elecciones de medio término, Massa le pidió a Bordet un lugar expectante en la lista que finalmente terminó ocupando Gustavo Zavallo en el tercer lugar, pero no pudo ingresar al Congreso porque el oficialismo provincial perdió. Luego vinieron los tiempos de la Alternativa Federal, que sentó en una mesa a Massa, Roberto Lavagna y gobernadores, entre ellos, el entrerriano.
Reconstrucción
El presidente de la Cámara de Diputados nunca dejó de pedir en Entre Ríos. Como lo hizo en 2017, volvió a hacerlo en 2019.
Mariela Tassistro, que terminó su mandato como diputada provincial ese año, asumió en mayo como directora nacional de Control de Puertos y Vías Navegables. En la apertura del local en Gulaeguaychú dijo: “Se está relanzando este espacio para la militancia, que es lo que sabemos hacer, no solo en Gualeguaychú, sino en toda la provincia”. Massa, a su turno, llamó a formar dirigentes jóvenes “y en la diversidad”, haciendo hincapié en los orígenes y en la actualidad del Frente de Todos.
Daniel Koch, que también finalizó su mandato como diputado provincial en 2019, al mes siguiente fue presentado ante las autoridades de Vialidad Nacional como el encargado de la delegación entrerriana del organismo. Estuvo acompañado por Bordet.
Massa visitó en Entre Ríos en dos oportunidades durante el año pasado. La primera fue el 1 de junio. Llegó a Paraná junto al ministro de Transporte de la Nación, Mario Meoni, en el marco de la reactivación del tren que une la capital con Colonia Avellaneda. Luego regresó el 20 de noviembre, también con Meoni, su jugador en el gabinete, para firmar convenios de obras en la ciudad de Diamante.
El presidente de la Cámara de Diputados se reporta a Bordet, pero también mantiene diálogo con funcionarios y referentes locales como Cresto y Bahl. La otra persona que lo une a Entre Ríos es Guillermo Michel, a quien nombró como asesor de la Presidencia en la Cámara baja. El contador y abogado gualeguaychuense fue el segundo de Ricardo Etchegaray en la AFIP durante el kirchnerismo. Venía de desempeñarse, también como asesor, en el bloque de senadores nacionales cuando era presidido por Miguel Ángel Pichetto. El joven asesor de 43 años, cuentan quienes lo conocen, sabe más que de cuestiones parlamentarias.