Con los datos a julio, el índice de inflación acumulada durante 2020 según el Indec es 15,8%, menos de un punto por debajo del aumento salarial del 16,6% que el gobierno de Axel Kicillof completó ese mes para el ámbito docente provincial. De esta forma, se espera que en agosto los indicadores inflacionarios oficiales superen el incremento que el Ejecutivo provincial otorgó al momento. Por tal razón, en el Frente de Unidad Docente Bonaerense (FUDB) tienen previsto acentuar el clamor paritario: si en los próximos días no hay una convocatoria formal del Gobierno, los gremios harán una presentación ante la cartera laboral requiriendo que se reanude la discusión salarial.
Así lo adelantaron a Letra P dirigentes de distintos sindicatos integrantes del FUDB que, a la vez, ponen énfasis en la necesidad de “un reconocimiento” a la labor docente en el presente contexto pandémico. Además de los recursos y gastos extra que se desprenden del desarrollo extraordinario de la actividad, en los gremios toman nota de los recientes aumentos, como en los combustibles.
“Como Frente de Unidad, si esta semana no hay un llamado, haremos un pedido de convocatoria directamente al Ministerio de Trabajo”, detalló a la secretaria General Adjunta del Suteba, María Laura Torre.
En diálogo con este medio, Torre subrayó que la pretensión gremial es no perder la diferencia que, hasta la primera mitad del año, puso al incremento salarial por encima de la inflación. Además, enfatizó: “Lo que se está pidiendo es un reconocimiento por todo lo que la docencia tuvo que apechugar desde la conectividad hasta los propios instrumentos de trabajo, llámese celulares, computadoras… En julio cobramos el último aumento, tenemos que pensar que septiembre tiene que ser otra etapa”.
En esa línea, desde Udocba, el secretario General de la entidad, Miguel Díaz, dijo a Letra P que en la última reunión de la comisión técnica salarial con funcionarios de los ministerios de Economía, Trabajo y Educación, las autoridades habían argumentado que el incremento salarial 2020 aún se posaba por encima de la inflación: “Es cierto. Estamos parejos en ese aspecto, pero necesitamos recomponer el salario por la pérdida que tuvimos durante el macrismo”. El titular de Udocba también comentó que el FUDB tiene previsto “enviar al Ministerio de Trabajo una nota para pedir la continuidad de las reuniones”. “Se nos dice que la Provincia no tiene plata. Pero esta Provincia es asistida por la Nación, que asistió a sanatorios privados, a empresas, ha emitido dinero. ¿No se podría emitir dinero para mejorar el salario de los estatales?”, se preguntó Díaz.
BRECHA DIGITAL. Mientras los ecos del portazo de la viceministra de Educación nacional, Adriana Puiggrós, señalan cruces ante la profundización de la brecha social entre los sectores que tienen y los que no cuentan con acceso a las herramientas tecnológicas, en la Provincia esa distancia también es materia de debate.
Al respecto, Díaz dijo que en terreno bonaerense “recién ahora están desbloqueando netbooks, pero no alcanza con esto. Hace falta una respuesta federal y a pesar de que el ministro (Nicolás Trotta) se comprometió, diciendo que los docentes iban a estar en este plan de conectividad, todos fuimos testigos de las computadoras que compraron los maestros a 3.600 pesos por mes. Esa fue la respuesta. Entiendo que la situación no es fácil, que no hay fondos, pero tenemos que empezar a recorrer un camino para terminar con esta brecha de injusticia educativa”.
Más allá de esa visión crítica, el dirigente de Udocba lejos estuvo de mostrar condescendencia con Puiggrós: “No es la primera vez que renuncia. Ya estuvo en Provincia y no dio respuestas a nada, tuvimos un grave problema con ella. Que no quiera tener ahora un rol de gremialista porque nunca lo tuvo, nunca luchó por el salario ni condiciones laborales”.
Por su parte, Torre observó: “La pandemia desnudó de dónde veníamos. La conectividad es importante como lo son las herramientas tecnológicas, puso blanco sobre negro el primer punto que implicaba poder tener una continuidad pedagógica o no. Las desigualdades se profundizaron y si la provincia de Buenos Aires venía desde hace mucho tiempo remándola, estos últimos cuatro años de Macri y Vidal fueron una profundización del deterioro y desinversión muy grande, que tiene la cara de un plan Conectar Igualdad que se frenó, de los libros que no se entregaron en cuatro años y que tiene la cara de Sandra y Rubén”, resumió.
LEJOS DE VOLVER AL AULA. Mientras en la Ciudad Larreta avanzó con un protocolo para abrir escuelas, en la Provincia los gremios avisan que lejos están de pensar un retorno próximo a la presencialidad. Torre dijo que gremios y la Dirección General de Escuelas están trabajando en el protocolo de vuelta a la escuela, junto a médicos y actores fundamentales; para “discutirlo con tiempo y tranquilidad”. “No estamos en un momento de volver ya a la escuela, es momento de discutir cómo va a ser ese futuro”, dejó en claro la dirigente.
Díaz, en tanto, expresó: “Espero que la Provincia no se contagie de Capital. Los docentes de la provincia han recreado una escuela en su propia casa. Van a las casas de los pibes, los visitan, reparten comida, dan clases todos los días y atienden el teléfono a toda hora. La educación está de pie, entonces, no hay que acelerar ni forzar nada”.