El presidente Alberto Fernández retomó la idea de Estado intervencionista en el sector privado en un encuentro de la Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresas (ACDE). Habló de los cambios que genera la crisis en la economía y de las deficiencias del capitalismo “especulativo” y recordó que, en este marco, muchos países están ayudando a salvar compañías. “Ayer (por el lunes), Alemania nacionalizó un laboratorio que estaba buscando una vacuna para el Covid 19”, dijo, y agregó que “antes, se metió en Lufthansa, donde el Estado alemán hoy tiene un 20% de las acciones”.
En el marco de un congreso de la ACDE comandado por Gonzalo Tanoira, presidente de la entidad y titular de Citrícola San Miguel, Fernández citó además el caso de Italia, que “tuvo que invertir en la FIAT para que no cayera”.
Las declaraciones, marcadas con resaltador en un texto que acompañó su discurso, se inscriben en un contexto en el que el Gobierno despliega ayuda a compañías vía pago de salarios privados (ATP) y abre procesos de moratoria impositiva para compañías. También cuando el Ejecutivo, vía un proyecto del gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, avanza en el rescate de la aceitera Vicentin, tras una marcha atrás a una idea inicial de expropiación.
A continuación, en un guiño a la dirigencia presente, trazó una teoría personal sobre el “buen capitalismo”. Dijo que el de “Enrique Shaw fue el mejor capitalismo, porque fue alguien que invirtió, creó trabajo y desarrolló la sociedad”. El hombre en cuestión fue el creador de la ACDE y uno de los religiosos que trasladó el Evangelio al mundo de los ceos.
“Cuando al capitalismo le importa más el gerente financiero que el gerente productivo, se vuelve más débil”, expresó Fernández, y agregó que es necesario “aprovechar la oportunidad para agregar valor a lo alimentos y exportarlos. Argentina tiene que llevar su industrialización al máximo, los países más exitosos son industrialistas”.
"Percibo en los líderes del mundo que la primera reacción es cerrar sus economías y dejar de depender del de al lado", consideró. Aunque aclaró que, de todos modos, no cree que haya "una opción al capitalismo"Sí creo que se fue degradando y es hora de ponerlo en su verdadera dimensión", cerró.