Trabajadores de diversas plantas de Tenaris -gigante metalúrgico controlado por el Grupo Techint- denunciaron que la empresa pretende pagar el 50% del salario neto en carácter no remunerativo, planteo que fue rechazado de plano por representantes gremiales de la UOM.
Voces sindicales consultadas por Letra P describieron que este escenario se reproduce en las plantas bonaerenses de Campana y Valentín Alsina, como en la de Villa Constitución (Santa Fe), donde los operarios podrían avanzar la semana que viene en acciones de protesta coordinadas de no encausarse las negociaciones con la patronal.
“Los trabajadores no aceptan cobrar la mitad del sueldo. Si no hay un acuerdo superador, que contemple las necesidades de los trabajadores y sus familias, nos preparamos para la lucha”, detallaron en un mensaje difundido desde Tenaris-Siat, en Valentín Alsina, donde consignaron a este medio que aún persiste -desde marzo pasado- la quita del premio a la productividad, ítem que estuvo vigente durante los últimos 50 años y que fue erradicado de forma unilateral por la empresa, lo cual también erosiona la masa salarial.
Asamblea reciente de trabajadores de Tenaris-Siat.
En campana, en tanto, este mes la siderúrgica paralizó -por segunda vez en la pandemia- su planta por 15 días.
El recorte salarial pretendido por Tenaris se da en un contexto donde, además, los trabajadores ponen énfasis en el hecho de estar percibiendo salarios del año pasado, con la paritaria vencida desde abril. Eso, sumado a casos como los de Siat, donde las suspensiones al 85% son aún más difíciles de sobrellevar sin el premio a la productividad, hace que el malestar se disemine como reguero de pólvora con esta nueva embestida del Grupo comandado por Paolo Rocca.
“La gente está con mucha bronca”, admitió una de las voces sindicales para describir que en la empresa existe “personal de muchos años que puso su esfuerzo para que Tenaris se convirtiera en una empresa líder para que en este momento de pandemia no tengamos una respuesta del empresariado que contemple las necesidades de la gente”.
“Se intentó por todos los medios tener una negociación seria”, ponderaron representantes gremiales que dieron cuenta de la “intransigencia” de Tenaris, al tiempo que enfatizaron que desde su lugar “se entiende el momento de baja producción” y hasta se exhibe predisposición a entablar charlas que deriven en un acuerdo en el marco del artículo 223bis de la Ley de Contrato de Trabajo. Pero rechazan de plano en recorte del 50%. “El porcentaje que se plantea es muy bajo, deja los trabajadores debajo de la línea de pobreza”, indicaron.
Las reuniones se mantienen constantemente. Este viernes vence el acuerdo de suspensiones. El lunes, si no hay un nuevo acuerdo, se definirá en asambleas los pasos a seguir. “Iremos coordinando las acciones entre todas las seccionales”, señaló una voz, para dar cuenta de la articulación entre los operarios de las diversas plantas de Tenaris.
Tenaris se puso en marcha en Argentina en 1948, con la constitución de Siderca, el único fabricante de tubos de acero sin costura de Argentina, por la sociedad antecesora de San Faustin. En 1986 adquirió Siat S.A., un fabricante argentino de tubos de acero con costura. Con el paso de los años, Tenaris se convirtió en una empresa global por medio de una serie de “inversiones estratégicas”. Más allá de esa posición, pretende que sus trabajadores afronten el resto de la pandemia percibiendo la mitad de su salario, algo que prende la mecha de la conflictividad laboral.