Tras la decisión del Gobierno nacional de intervenir Vicentin y girar al Congreso un proyecto de ley para su expropiación, filiales bonaerenses de la Federación Agraria Argentina (FAA) enroladas en Bases Federadas (agrupación crítica a la conducción de Carlos Achetoni) dieron señales de acompañamiento a la medida y consideraron “positivo” que la agroexportadora no caiga en manos de multinacionales del sector. En esa línea, también bregaron por un avance futuro hacia un modelo cooperativo de la empresa, con participación de pequeños y medianos productores y productoras.
“No creo que sea el principio de un proceso de expropiaciones. Si esto se mira desde el lado de que no pase a una trasnacional, es positivo”, consignó en diálogo con Letra P la titular de la filial Junín de FAA, Rosana Franco, para enfatizar: “En la Federación Agraria pretendemos que sea una cooperativa con un capital público-privado”. Al destacar los ejemplos de cerealeras como la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA) y Agricultores Federados Argentinos (AFA), Franco resaltó que una estructura como la de Vicentín podría avanzar hacia esos esquemas: “Son exitosas y están en muchísimos pueblos, donde el productor comercializa y está conforme mayoritariamente”.
La dirigente federada juninense también ponderó el rol de YPF Agro, que tendrá el control de Vicentin: “El productor está tomando mucho la posibilidad de comprar el gasoil, entrega cereal, hay toda una situación que el productor utiliza porque tiene sus beneficios”, manifestó. Y añadió que, hasta el momento, en el caso de distritos del noroeste bonaerense, como Junín, era escaso el nivel de comercialización de los productores con la agroexportadora intervenida.
En Bases Federadas ya venían solicitando una mayor injerencia estatal en el mercado de granos. Así lo había expresado días atrás a Letra P el expresidente de FAA, Omar Príncipe: “La Federación Agraria ha sido históricamente uno de los que ha propuesto que el Estado tenga participación del comercio exterior de alguna manera virtuosa”. Así, apeló a una mayor intervención estatal en la exportación de granos, tendiente a evitar la concentración que observa creciente, en detrimento de las cooperativas.
Por su parte, la dirigente de la filial Tandil de FAA, Nélida Sereno, destacó que la intervención “es importante fundamentalmente por dos temas: primero, por el bien de sus trabajadores y, segundo, porque casi 2.600 productores podrán seguir operando con esta firma”. “Es importante que el Estado Nacional se haga cargo, antes de que la misma pase a manos de multinacionales”, dijo a Letra P.
Y, posando la mirada en la pasada gestión macrista, se preguntó: “¿Por qué empresas de estas características fueron tan favorecidas con préstamos del Banco Nación? A veces, un pequeño productor necesita financiamiento para seguir con su explotación y le cuesta mucho conseguirlo. Pero para estas otras empresas amigas del poder de turno había dinero suficiente y no tenían ninguna dificultad en otorgárselos”, criticó.
De cara al modelo de gestión empresarial de Vicentin, Sereno remarcó: “En Bases Federadas vemos que en un futuro sería importante que también el movimiento cooperativo sea parte de esta empresa”.