En plena negociación de las listas electorales entre el PRO y la Unión Cívica Radical (UCR), el macrismo salió a apagar el reclamo radical más reciente de utilizar las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) para definir el candidato presidencial de Cambiemos, en lo que el Gobierno siente como un desafío a la auatoridad de Mauricio Macri. “No vemos conveniente que haya internas con el Presidente”, sostuvo el vicepresidente primero de la Legislatura porteña y secretario general del PRO, Francisco Quintana.
Tras la Convención Nacional realizada en Parque Norte, el radicalismo propuso ampliar Cambiemos y forjar un acuerdo con Alternativa Federal. Al mismo tiempo, insiste con ir a internas contra Mauricio Macri, a quien el PRO defiende a capa y espada como el mejor candidato para asegurar la reelección del frente que ese partido integra junto a la UCR y la Coalición Cívica de Elisa Carrió.
El rechazo de Quintana a una interna presidencial llega horas después de que el jefe de Gabinete de Alfredo Cornejo, el radical Andrés Lombardi, marcara que “están todos los caminos abiertos, inclusive una fórmula conjunta o una definición mediante PASO”. Hizo esas declaraciones a la salida del encuentro entre el gobernador de Mendoza con el jefe de Gabinete, Marcos Peña.
Rápidamente, el Gobierno sale a frenar el reclamo radical y le cierra la puerta a una hipotética interna presidencial. “Nuestro candidato es Mauricio Macri”, sostuvo Quintana en diálogo con Radio La Red. Sin embargo, el diputado macrista resaltó que el PRO está dispuesto a negociar con la UCR el compañero de fórmula del Presidente.
“No necesariamente el candidato a vicepresidente tiene que ser del PRO”, subrayó Quintana, quien cerró con un tiro por elevación para los radicales: “Más que nominar, sería importante que las otras fuerzas políticas propongan” un nombre.