El jefe de Gabinete, Marcos Peña, se sumó al coro de funcionarios y dirigentes del oficialismo que se anotaron para cuestionar la resolución de la Corte Suprema de Justicia de la Nación que podría posponer el juicio previsto contra Cristina Fernández de Kirchner por el direccionamiento de la obra pública. "Genera la percepción en mucha gente de que la impunidad se puede consagrar", rugió el ministro coordinador.
Por la mañana, el presidente Mauricio Macri sostuvo: "No queremos que haya impunidad" y el ministro de Justicia, Germán Garavano, consideró "inusual" la decisión del máximo tribunal. "Cuando se hace justicia se puede dilucidar quién es culpable y quién no y se puede avanzar sobre recuperar los bienes que estuvieron desviados por la corrupción", recordó Peña.
"Claramente no hay más lugar para la impunidad, para esta concepción de me llevó todo cuando llego al poder", aclaró en diálogo con Radio La Red. Para el funcionario "tiene que haber un mensaje muy claro de la ciudadanía sobre en qué tipo de país queremos vivir hacia el futuro" en el sentido de respetar las leyes y la Constitución.
"La mirada sobre la Justicia que tiene el kirchenrismo, que viene manifestando expresamente, es que ellos creen que la justicia tiene que se militante, cuando nosotros sostenemos que hay que defender la Constitución y a los jueces independientes", aseguró.