Las instalaciones del conglomerado de medios más grande y del más grupo de telecomunicaciones más poderoso del país, Clarín, amaneció este miércoles rodeada de un impresionante dispositivo de seguridad que impidió el ingreso de los trabajadores despedidos, luego que la gerencia general del holding anunciara vía mail que, producto de la "fuerte reconversión" del sector, implementó "una reducción de su plantel".
La comunicación oficial, firmada por Héctor Aranda, fue enviada a los correos electrónicos de los empleados de la empresa durante esta madrugada y se complementó con el despliegue de policías y agentes de seguridad privada en la planta gráfica de la calle Zepita y en la histórica redacción de Tacuarí, en el barrio de Constitución.
Tras una reunión con directivos de la empresa, la Comisión Interna del Sindicato de Prensa de Buenos Aires (Sipreba) denunció que los despidos alcanzan a 56 trabajadores del diario Clarín, sel deportivo Olé y del sector de fotografía. El gremio convocó a una concentración y una asamblea masiva para las 12 del mediodía del miércoles en la puerta del diario.
"La industria de los diarios está atravesando en el mundo un proceso de fuerte reconversión para responder a la nueva realidad del mercado. Hace años que la inversión publicitaria en la gráfica muestra una tendencia declinante, que no logra compensarse con la publicidad online, fuertemente concentrada en otras plataformas" justificó la empresa en la carta interna dirigida a sus empleados.
Sin embargo, a fines del año pasado y durante la discusión del Presupuesto, el grupo conducido por Héctor Magnetto desplegó un fuerte lobby en el Congreso para conseguir una serie de medidas que le permitieron profundizar su posición dominante en el sector de medios.
A propuesta del proyecto impulsado por Diego Bossio que resolvió la desregulación del precio del papel, y también la eliminación de la obligatoriedad de abastecer el mercado interno para Papel Prensa, Clarín sumó dos beneficios millonarios que se expresaron en los artículos 90 y 91 de la ley de leyes.
El primero, introdujo un cambio en el artículo 7 de la ley de Impuesto al Valor Agregado (IVA) para incluir a las "las suscripciones de ediciones periodísticas digitales de información en línea" al listado de productos cuya venta está exenta de pagar el tributo. En la actualidad, los suscriptores de Clarín superan holgadamente los 100.000, por lo que la medida tendría un impacto millonarios en las cuentas del grupo.
Por su parte, el artículo 91 habilitó a los medios de comunicación a computar como crédito fiscal los aportes patronales, lo que en la práctica opera como una nueva reducción del IVA para las empresas de medios, un beneficio que va a favorecer a las principales empresas.
El reverso de estas medidas fue la actualización del monto de IVA que deben pagar los pequeñas y medianas empresas de medios, que llevó el tributo desde el 2,5% al 5%.
A todo esto hay que sumar que durante la gestión Macri se habilitó la fusión de Cablevisión y Telecom, la que dio nacimiento al conglomerado de telecomunicaciones y medios más grande de toda la región, con control de mercado desde la telefonía fija y móvil, a los servicios de internet y de televisión por cable.