El jefe de Gabinete, Marcos Peña, buscó cortar de raíz las especulaciones acerca de una posible primaria presidencial en la alianza de gobierno, con un postulante radical que pueda competir con Mauricio Macri.
Consultado puntualmente sobre si es posible una interna por la candidatura presidencial contra la UCR y Martín Lousteau, Peña dijo que "es posible desde el momento en que es legalmente posible”, pero remarcó: “A priori, yo creo que hoy hay que fortalecer al Presidente, claramente”.
Macri “es el referente indiscutido de Cambiemos y así lo han expresado la mayoría de los dirigentes”, subrayó.
El jefe de Gabinete se declaró estar “convencido” de que el jefe de Estado va a ser reelecto porque “representa e interpreta una demanda mayoritaria de cambio".
En ese sentido, sostuvo que si bien “han sido meses muy duros", el Presidente cuenta con un “nivel de apoyo” que “lo pone en el mismo lugar o encima de los votos que obtuvo en la primera vuelta en 2015”.
“No tengo dudas de que es Mauricio el candidato que tiene que seguir gobernando este país”, respondió Peña, asimismo, en otra entrevista, que publica este domingo el diario Clarín, al ser consultado si se baraja la posibilidad de un proyecto electoral con María Eugenia Vidal en caso de que siga cayendo la imagen del mandatario.
En cuanto a la gobernadora bonaerense dijo que ”tiene un compromiso y un coraje que siempre nos conmueve y nos inspira para seguir dando la pelea en la provincia de Buenos Aires” y “está cumpliendo su palabra, aparte, de que no iba a usar a la provincia de Buenos Aires como un trampolín”.
“Hablamos todos los días con ellos, no hay ninguna duda que no solo los mercados sino todos los referentes internacionales del mundo creen que Macri es alguien que tiene un liderazgo claro, un rumbo correcto, y es alguien a quien apoyar", sostuvo en su intento de blindar el proyecto reeleccionista, y agregó que “la duda es si hay o no un compromiso político amplio de ir por ese camino en la Argentina”.
“Que gane Cristina Kirchner sería un fracaso de la Argentina, pero eso no va a ocurrir, estoy convencido”, añadió.
Según su mirada, "en todas las variables" la Argentina está "mejor que en 2015" porque se han reconocido los problemas y se ha encarado "el camino de la solución", al tiempo que reiteró que "no hay un atajo mágico posible", en referencia a la situación económica del país.
"Cuando uno mira dónde estábamos en 2015, teníamos cepo cambiario, tarifas congeladas y distorsionadas, no sabíamos cuánto era la inflación, no había libertad de comercio y teníamos un déficit fiscal altísimo. En todas esas variables hemos encarado el camino de la solución", dijo.
"No estamos igual de mal, reconocimos el problema y estamos trabajando en la solución", enfatizó, y llamó a recordar la "fragilidad" con la que encontraron en 2015 el país, "sin reservas, sin energía, con un déficit enorme, sin financiamiento externo, sin estadísticas".
Admitió que la preocupación del Gobierno es "por lo que viven los argentinos en un contexto de recesión, de dificultades, es permanente", y no por los movimientos del dólar.
En cuanto al futuro del mercado cambiario, subrayó que el Gobierno tiene "un equipo muy competente para enfrentar un año de volatilidad, centralmente por lo que genera un año electoral”.
En otro orden de cosas, Peña aseguró que Cambiemos ha llegado a acuerdos para evitar internas partidarias en todas las provincias que tienen calendario electoral fijado, con la sola excepción de Córdoba, debido a que ese mecanismo supone una “complicación”.
"Los criterios generales de la mesa nacional que hemos planteado en todas las provincias es, en primer lugar, la búsqueda de consenso. Buscamos evitar las internas partidarias porque siempre tienen una mayor complicación", dijo Peña.
Agregó que "en ese marco, el dato más importante es que en todas las provincias que tienen calendario electoral fijado" ya se ha "llegado a acuerdos" y que Córdoba "es un caso único que hay que entenderlo en ese contexto".
El jefe de ministros explicó que venían "trabajando y dialogando" ese tema y que incluso habían acordado en diciembre con Ramón Mestre "usar el mismo mecanismo" que van a utilizar "en Tucumán", con "la posibilidad de definirlo por encuestas".
Pero, según consignó Peña, en enero, Mestre "consideró que habían cambiado las condiciones y que no quería ese mecanismo, que quería ir a la interna. Nosotros en febrero planteamos desde la mesa nacional que la fórmula (Mario) Negri - (Héctor) Baldassi era más competitiva".
"El límite que tenemos que evitar es que esto fuerce cualquier tipo de ruptura o debilitamiento de Cambiemos", señaló Peña.
Al ser consultado sobre la elección para gobernador que se realiza este domingo en la provincia de Neuquén, el jefe de los ministros evitó hacer comentarios y se limitó a decir que se trata de "una elección local" y que no iba a "especular sobre un resultado que todavía no ocurrió”.