El mismo peronismo que por la mañana de este jueves posó para la selfie de “unidad en la diversidad” detrás de Omar Perotti le asestó horas después una dura estocada al gobernador electo de Santa Fe, al convalidar en el Senado provincial el presupuesto que elaboró el socialista Miguel Lifschitz.
En formato exprés, apenas 24 horas después de haberlo recibido en la Legislatura, los senadores del Frente Progresista y seis de sus pares del PJ, liderados por el cacique Armando Traferri, le dieron media sanción a la ley de leyes santafesina.
Además de Traferri, levantaron la mano José Baucero, Rubén Pirola, Osvaldo Sosa, Joaquín Gramajo y Guillermo Cornaglia. Descolocados y enfrentados con sus compañeros de bloque quedaron el rafaelino y ladero de Perotti, Alcides Calvo, más Ricardo Kaufmann, Danilo Capitani, Eduardo Rosconi y Cristina Berra.
La movida abre un interrogante enorme ante la chance cada vez más certera de que el peronismo se parta en la Cámara Alta, luego de que haya demostrado homogeneidad durante varios períodos.
Traferri es el mayor socio político de la vicegobernadora Alejandra Rodenas, que hoy temprano defendió los ruidos internos y aseguró que el peronismo “se banca sus tensiones”.
Perotti, después de ella, bregó por una “unidad hasta que duela” y luego posó sonriente junto a los legisladores que sobre el cierre de la jornada aprobaron un presupuesto que él no confeccionó.
Al lado del mandatario electo, recogieron el guante rápidamente y calificaron a la media sanción de “escándalo”. Es que, como reprochó la senadora Berra en plena sesión, se aprobó sobre tablas y a libro cerrado.
“Está claro que entre Traferri y Lifschitz hay más que un acuerdo político, nunca en la historia un gobierno saliente le armo el presupuesto al entrante”, se exclamó a través de un comunicado firmado por los intendentes y presidentes comunales del PJ.
Traferri dio sus explicaciones y aseguró que no es la primera vez que un cálculo de recursos y erogaciones se aprueba sobre tablas, porque – según él – ya sucedió en 2010 y 2011 bajo la gobernación de Hermes Binner.
El sanlorencino intentó salir por arriba del brete. Le pegó a Lifschitz porque creó una “bomba de humo” al ponderar “supuestas divergencias” entre el bloque de senadores y Perotti.
Traferri avisó que se considerará “oficialista” a partir del 11 de diciembre. “No porque adherimos tibiamente a la fórmula Perotti - Rodenas, sino porque creemos en la cualidades de estos compañeros. Fuimos cogestores del triunfo electoral, cada uno de los senadores dio todo lo que estaba a su alcance”, remarcó, para luego repetir la misma frase que destacó Perotti a la mañana: “unidad en la diversidad”.