El último Índice de Confianza al Consumidor de Rosario cerró el 2018 con un nivel muy bajo de confianza. Según el estudio, el 83,4% de los rosarinos y rosarinas considera que la situación económica actual es peor a la registrada hace un año.
“Con las medidas anunciadas está claro que el ajuste va a continuar, con un aumento de las tarifas que claramente representará más inflación de la proyectada. Las perspectivas no son buenas”, sostuvo el diputado provincial Rubén Giustiniani al presentar, junto a su compañera de bloque Silvia Augsburger y el ex decano de la Facultad de Ciencias Económicas Javier Ganem los resultados realizados por el Centro de Estudios Igualdad, espacio ligado a los ex legisladores del Frente Progresista, entre el 12 y 14 de diciembre sobre 500 casos.
El índice arrojó un valor de 29,3, que representa en términos agregados una confianza en niveles muy bajos de los consumidores. Continúa así la tendencia evidenciada a lo largo del año 2018. “Se mide de 0 a 100 siendo el 0 la desconfianza absoluta. Durante todo 2018 dio por debajo de los 30 puntos, cerrando un pésimo 2018”, explicó Giustiniani, para luego agregar: “La percepción más negativa se da en los sectores más humildes, en las mujeres y en adultos mayores”.
Otro dato significativo del relevamiento es que los ciudadanos con expectativas negativas acerca de la evolución futura de la economía superan a quienes visualizan una mejora dentro del próximo año. Así, frente a la pregunta “¿Cómo considera que será la situación económica del país dentro de un año, respecto de la actual?”, el 34,5% considera que estará peor, frente al 32,3% que alientan una expectativa positiva.
En cuanto a la disposición al consumo, continúa como el trimestre anterior la fuerte retracción en la intención de compra de bienes durables como muebles, televisores, lavarropas, computadoras u otros aparatos electrodomésticos. El 74,1% considera que no es un buen momento para ese tipo de compras, mientras que el 82,8% se expresa negativamente respecto a la disposición a la compra de bienes de mayor valor como autos y casas.
“Estos resultados demuestran un gran desánimo que reina en la población, en los consumidores, acerca de la situación económica actual y expectativas a futuro. La economía está en un círculo perverso de desánimo, caída del consumo y recesión”, señaló Ganem.