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El plan anti-crisis de La Matanza para bajar los precios hasta un 30%

Ante la caída del consumo, Giorgi se reunió con Fera, Walmart y Carrefour para ofrecerles facilidades para readaptar sucursales a cambio de una fuerte reducción de los valores.

La caída del consumo no sólo impulsó a María Eugenia Vidal y Horacio Rodríguez Larreta a moverse y buscar salidas para estimular la demanda y contener los precios. Según información a la que tuvo acceso Letra P, La Matanza, el municipio más poblado del país, tiene en marcha un plan anti crisis que se centra en reactivar la demanda, bajar los precios de las canastas básicas y ayudar a los supermercados a un proceso de reconversión para que no terminen en crisis como ya ocurrió en otras localidades.

 

La iniciativa en el distrito que conduce Verónica Magario está comandada por la secretaria de Industria, Débora Giorgi, que se reunió con varios pesos pesado del sector para diagnosticar la situación y buscar alternativas. Vieron a la funcionaria directivos de la firma Maxiconsumo, de Víctor Fera; la francesa Carrefour y la estadounidense Walmart. ¿Qué es lo que se cocina? “Estamos en un etapa de análisis, de buscar mejores precios que los de mercado, porque el consumo, como en todo el país, está caído”, confiaron a este medio algunos de los técnicos que llevan adelante la idea de darles a los comercios nucleados en la Asociación de Supermercados Unidos (ASU) y a los independientes una serie de beneficios como habilitaciones, permisos de obra y facilidades de acceso para que se reconviertan y, a cambio, puedan generar rebajas de hasta 30% en los precios de los productos que ofrecen.

 

Magario en el centro de distribución de Carrefour, con el ex CEO que fue desplazado en la crisis. 

 

 

En los encuentros con las empresas se pusieron sobre la mesa algunas posibilidades de reconversión que los supermercados ven con buenos ojos. La más saliente, que se reduzcan las superficies comerciales en cantidad de metros cuadrados para vender, en lugar de 30.000 productos, unos 10.000 en un espacio físico menor. Esto redundaría en una mejora en los costos de los comercios, que podría compensar el beneficio bajando los precios. ¿Qué pasaría con la parte de la superficie que no se utilice? La idea es que los supermercados las pongan en alquiler para otros interesados o bien las transformen en depósitos. Naturalmente, el distrito pidió que las reconversiones no redunden en despidos de trabajadores. A priori, los súper no piensan en esa variante. De hecho, fue el propio Fera el que habría planteado la conveniencia, en su caso, de abrir un galpón nuevo. Mientras que Carrefour tendría en carpeta acondicionar su centro de distribución. Vale decir que La Matanza no escapa a la lógica del consumo en el país, siendo las zonas de Laferrere las más complicadas, con algo de mejora en San Justo.

 

Por la conformación social del municipio, la preocupación pasa por generar alternativas de canastas más económicas a usarse por los sectores más vulnerables. De hecho, hay algunos datos que inquietan. Ya ha habido por el Día del Niño y otras jornadas pedidos puntuales de organizaciones sociales al distrito. Una mala señal que prevé un diciembre complejo. De todos modos, en el vidalismo apuntan que “la gobernadora está atenta en particular en lo que pase allí”. Según Kantar Worldpanel, en los últimos dos meses el consumo más resentido fue el de los segmentos bajos, con caídas superiores al 2%.

 

 

 

 

 

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