Horas después del veto a la ley anti tarifazo, el presidente Mauricio Macri buscó mostrarse proactivo y continuó con su gira por el noroeste argentino (NOA), que incluyó reuniones con gobernadores de la región, encuentros fugaces con intendentes de las ciudades capitales de esas provincias y una arenga a la Mesa Nacional de Cambiemos, tras una semana convulsionada por el incremento en las boletas de los servicios públicos y la Marcha Federal.
Tras el veto a la ley que aprobó el Senado en las primeras horas del jueves, Macri buscó mostrarse activo y con el foco en la gestión. En ese marco se realizaron los encuentros bilaterales con los mandatarios Juan Manuel Urtubey (Salta), Lucía Corpacci (Catamarca), Juan Manzur (Tucumán) y Gerardo Zamora (Santiago del Estero), con quienes dialogó sobre temas de la agenda regional.
Macri, Manzur y el ministro del Interior, Rogelio Frigerio (FOTO: Prensa Presidencia)
Tras el veto a la ley aprobada por el Senado, el Jefe de Estado encabezó en Salta un encuentro de la Mesa de Energías Renovables junto a Urtubey. Más tarde, mantuvo una audiencia con los intendentes de las ciudades capitales de Salta, Jujuy, Tucumán y La Rioja y saludó a gendarmes que participaron en un operativo antidrogas.
Macri aprovechó su estadía en Salta para profundizar el vínculo con el intendente de Salta capital, Gustavo Sáenz. La Casa Rosada lo quiere como candidato a gobernador en 2019, aunque su promoción genera ruidos puertas adentro de la coalición Cambiemos. El ala política confía en su “buena imagen” dentro de la provincia norteña, pero el diputado Martín Grande también pide pista.
Tras ese encuentro a solas con Sáenz, Macri encabezó la reunión de la Mesa Nacional de Cambiemos, donde buscó arengar a la tropa y defendió la marcha de la gestión, el plan económico y el acuerdo con el FMI, que podría concretarse en las próximas semanas.
