La vicepresidenta Gabriela Michetti y la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, se expresaron este martes “en contra de la despenalización del aborto” pero respaldaron el debate en el Congreso, su “ámbito natural”, al tiempo que desestimaron la posibilidad de que se convoque a una consulta popular, como reclaman algunos sectores sociales y de la oposición.
La postura expresada por ambas funcionarias contrasta con la de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien el 10 de marzo reveló durante la cumbre del PRO de Parque Norte su postura "a favor de la despenalización" del aborto. Esta queda, de esta manera, casi en soledad en el oficialismo que, por orden del presidente Mauricio Macri, lanzó el debate en el Congreso como parte de las políticas de igualdad de género y tras las masivas marchas convocadas por organizaciones sociales en reclamo de la ley.
De esta manera, el debate sobre el aborto marcó una división en el primer encuentro del gabinete femenino de Macri, del que participaron además de la vicepresidenta y las dos únicas ministras nacionales, Stanley y Bullrich, la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, y más de 700 secretarias, subsecretarias, directoras y coordinadoras de programas de distintos ministerios.
Durante una conferencia de prensa realizada este martes en el CCK, al término del denominado “gabinete ampliado de mujeres”, Michetti defendió junto a Stanley y a la titular del Instituto Nacional de las Mujeres, Fabiana Tuñez, las políticas de igualdad y paridad de género aplicadas desde 2015, pero admitieron que “falta crecer en paridad”, al reconocer que las mujeres son minoría en el propio gabinete.
“Yo, personalmente, estoy en contra de la despenalización del aborto, pero estoy a favor de la apertura de este debate, para que haya políticas de educación sexual, informar a las jóvenes sobre métodos anticonceptivos. Porque hoy, de las mujeres embarazadas adolescentes, el 70 por ciento no fue buscado, y es necesario que esas mujeres puedan acceder a métodos anticonceptivos y sepan cuidarse”, dijo Stanley. Esta respondió la primera pregunta periodística, que había esquivado Michetti al pasarle el micrófono a la titular de Desarrollo Social.
Stanley dijo que “el ámbito donde se tiene que dar este debate es en el Congreso, donde serán convocados los distintos actores para tener su opinión. Y si en ese marco, se resuelve, creemos que el Congreso es el ámbito natural para que se defina este tema. Ahora, si ahí se definiría si es necesaria una consulta, se verá”.
Por su parte, Michetti se opuso a convocar en principio a una consulta popular. “Tenemos una democracia representativa y tenemos que empoderar al Congreso. No tenemos ningún problema con que la gente opine, pero creemos que el ámbito razonable para un debate de este estilo es que lo den las fuerzas representantes de la ciudadanía”, arengó.
Así, dos de las mujeres más poderosas del gobierno de Macri salieron a exponer la postura mayoritaria del oficialismo respecto de la legalización del aborto, en contraposición a Bullrich, que la semana pasada en el marco del encuentro del PRO había dicho que “es necesaria una discusión inteligente, separar la legalización de la penalización". "Estoy a favor de la despenalización del aborto. Hay que tratar de sacar el tema del Código Penal", enfatizó la ministra de Seguridad, a quien se la vio sentada en las primeras filas del CCK.
Tuñez y Michetti defendieron las políticas de género y refutaron a quienes acusan a Macri de acoplarse al tema a partir de la creciente demanda de la sociedad no solo sobre el aborto, sino también respecto a la igualdad de género entre los cargos jerárquicos, la igualdad salarial y contra la violencia de género.
Michetti reconoció que “en el Gabinete nacional siempre estamos en la necesidad ampliar. Tenemos muchísimas mujeres trabajando. Sobre todo Mauricio, el Presidente, ha dado lugar, siempre estuvo acompañado por mujeres en los lugares chicos de decisión, pero somos muy conscientes de que tenemos que crecer en número”.
No obstante, agregó: “Si mirás solo eso y no todo lo demás, al final parece que lo único que vale es si tenés mitad y mitad de ministros y de ministras, pero no necesariamente la paridad hace a la igualdad de género. En este tema tenemos que crecer”.
Stanley aseguró, por su parte, que la “igualdad salarial” está garantizada en el Gabinete nacional a partir de la “equiparación de los cargos”, ya que los ingresos en la administración central se definen por categorías, más allá que los ocupen hombres o mujeres.